Fueron numerosos los testigos que pudieron describir al presunto asesino

Jaén

Mataron a «navajazos» a un sacristán por pedirle que se pusiera una mascarilla en plena pandemia

Los hechos sucedieron el 26 de febrero de 2021 en una iglesia de Alcalá la Real

En época de pandemia, un municipio jienense fue el escenario de un brutal asesinato. Presuntamente, un individuo que se encontraba en situación de mendicidad, asestó numerosos navajazos a un sacristán a las puertas de una iglesia por pedirle que se colocara correctamente la mascarilla.

Fue en la Iglesia de la Consolación donde tuvo lugar el terrible suceso el 26 de febrero de 2021 en torno a las 20:00 horas. La víctima, de 52 años con determinado grado de discapacidad, era el sacristán del templo y al percatarse de que el individuo estaba sin mascarilla en la entrada de la casa de la Virgen de las Mercedes le instó a que «se colocase la mascarilla facial obligatoria en aquella época, o en caso contrario, se abstuviera de acceder a la iglesia», tal y como recoge el escrito de calificación del Ministerio Fiscal.

El mismo documento hace constar que, tras el consejo del fallecido, se produjo una fuerte discusión en la que el supuesto asesino «comenzó a dirigir múltiples golpes y puñetazos» al ayudante. Asimismo, según el texto del Ministerio Público, este «sacó una navaja que llevaba guardada entre su ropa» y «asestó numerosos navajazos» al hombre de 52 años, causándole perforaciones «en la práctica totalidad de su torso y en la cabeza, impidiendo que pudiera haber llegado a defenderse en modo alguno».

Así las cosas, el sacristán fue herido con «lesiones de tal gravedad que, globalmente consideradas, resultaron forzosamente incompatibles con el mantenimiento de la vida». Los forenses dictaminaron que la causa de la muerte fue un shock hemorrágico-hipovolémico derivado de «las múltiples heridas ocasionadas por los repetidos y violentos navajazos».

Fueron numerosos los testigos que pudieron describir al presunto asesino, que horas después de los hechos fue arrestado. Desde entonces permanece en prisión preventiva hasta la celebración del juicio.

Este lunes, 4 de noviembre, la Audiencia de Jaén juzgará al preso mediante un tribunal con juzgado por los hechos mencionados. El Ministerio Fiscal, pide para el sujeto una pena de 20 años de prisión y una indemnización de 40.000 euros para el hermano del sacristán por la calificación del suceso como constitutivo de un delito de asesinato.