Andalucía
La Confederación del Guadalquivir cierra casi 300 pozos ilegales en Doñana desde 2019
La CHG trabaja también en clausura de otras 205 tomas fuera de la ley
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, ha cerrado en los últimos cinco años 296 pozos ilegales en el entorno del espacio natural de Doñana y están en proceso de tramitación para ser clausurados otros 205.
Además, se han cerrado otros 476 pozos que estaban regularizados por sustituir el uso de agua subterránea por superficial, según el último informe de la Comisión de Seguimiento del Plan Especial de Ordenación de las zonas de regadío de la Corona Norte Forestal.
En la acción de la CHG contra estas captaciones ilegales, el cierre en procedimientos de ejecución forzosa ha venido acompañado de la ejecución de medidas cautelares de precintado de tomas en procedimientos sancionadores contra 66 tomas, cuyo objeto es impedir la continuidad de la derivación ilegal del agua. La superficie ilegal estimada que riegan estas tomas es de unas 229 hectáreas y el volumen de agua derivado es de 1.274.881 m3 al año.
El informe recoge que la CHG promueve dos planes de inspección de cultivos bajo plástico cada año, recurriendo para ello a técnicas de teledetección espacial y, en virtud de los datos obtenidos, se preparan planes específicos de visitas para la inspección. En la campaña 2023-2024 se han ejecutado tres planes de inspección teniendo en cuenta los resultados obtenidos en el tratamiento de imágenes satélite por teledetección.
En total, ha habido 69 actuaciones y han sido inspeccionadas 631 hectáreas, localizadas 326 hectáreas de cultivo bajo plástico ilegal, 38 pozos y 16 balsas no amparadas por título administrativo.
La evolución de la superficie en la que se implantan los cultivos bajo plástico en el entorno de Doñana viene reflejando una leve aunque progresiva disminución, reduciéndose desde las casi 6.000 hectáreas que se reconocieron a comienzos de la serie (otoño de 2017) a unas 5.500 hectáreas en la actualidad.
De estas superficies cultivadas, unas 700 hectáreas se sitúan fuera de la superficie agrícola regable, por lo que sobre ellas hay una presunción de ilegalidad que motiva las inspecciones de la CHG.