Piden 11 años de prisión para un padre y un hijo acusados de intentar matar a un guardia civil en Almería

La sección segunda de la Audiencia Provincial de Almería tiene previsto celebrar este martes, a partir de las 9:30 horas, el juicio contra dos hombres, padre e hijo, acusados de intentar matar a navajazos, con palos y ladrillos a un hombre que se identificó ante ellos como agente de la Guardia Civil y con el que unos días antes habían tenido una discusión de tráfico. La Fiscalía ha solicitado, para cada uno de los acusados, una pena de 11 años de cárcel, por un delito de homicidio en grado de tentativa y otro de tenencia ilícita de armas.

Según el escrito provisional, los hechos se desencadenaron el pasado 21 de septiembre de 2021, cuando este padre e hijo de 66 y 42 años de edad se encontraron con su víctima, quien estaba fuera de servicio, y les recriminó a los acusados su actitud por estar obstaculizando con su vehículo la vía pública. Los acusados le habrían gritado en ese momento «con ánimo de atemorizarlo» palabras y frases como «te vamos a rajar», «ya te veremos» o «eres un mierda», lo que hizo que el hombre abandonara el lugar.

Aproximadamente un mes y medio más tarde, los dos procesados se toparon con la víctima, cuando andaba por las inmediaciones del Auditorio Maestro Padilla de Almería, y le empezaron a gritar «ahí está el mierda del otro día». La víctima al escucharlos, se habría identificado como agente de la Guardia Civil con la intención de que se detuviesen. Sin embargo, los acusados decidieron abordarlo y abalanzarse sobre el mismo «con claro ánimo de causarle una muerte cierta». Además, según el escrito provisional de la Fiscalía, uno de los acusados habría sacado de la cintura un objeto contundente con el que le habría golpeado en el pecho, brazos y hombro izquierdo a la víctima, antes de que el otro acusado le clavara presuntamente en el costado izquierdo una navaja de casi 19 centímetros.

Aunque la víctima consiguió zafarse, el primero de los atacantes se habría dirigido otra vez hacia el perjudicado esta vez con una navaja de 41 centímetros, la cual «trató de clavársela reiteradamente» hasta que el perjudicado consiguió alejarse unos metros y llamar a la policía. Pese a ello, los procesados se habrían dirigido de nuevo hacia él con un palo de grandes dimensiones que habrían extraído del maletero de su coche, mientras que el otro le habría arrojado varios ladrillos que había en el suelo. No fue hasta el momento en el que escucharon las sirenas cuando ambos acusados se habrían alejado de la víctima, siendo detenidos, no obstante, por la Policía Nacional.

Además de las penas privativas de libertad, la Fiscalía también solicita diez años de alejamiento a no menos de 500 metros con respecto a la víctima, así como el pago de una indemnización de 762 euros por las lesiones producidas en concepto de indemnización.