Este edificio, que fue hotel durante la Exposición Iberoamericana, se vende en Idealista
Sevilla
La historia del edificio que fue un hotel durante la Expo y ahora es una casa en venta por 1,59 millones
Su precio no está al alcance de todos los bolsillos, pero el inmueble es un relato del siglo XX en la capital hispalense
La Exposición Iberoamericana de 1929 fue un acontecimiento en la ciudad de Sevilla. Fue inaugurada en mayo de aquel año y clausurada en junio de 1930.
Todos los pabellones hispanoamericanos se situaron en el entorno del parque de María Luisa, al que se le dotó de la construcción de la plaza de España al norte y de la plaza de América al sur.
Obviamente, fue un evento que atrajo los ojos del turismo. Algunas cifras hablan de unos 158.914 viajeros extranjeros alojados en los hoteles sevillanos en aquel 1929, lo que supondría un incremento del 126 % respecto al año anterior.
La capital hispalense se había dotado para alojarlos de una oferta hotelera que desembocó en el concurso para la realización del Gran Hotel Alfonso XIII, convocado en 1916, o el hotel Majestic, levantado entre 1927 y 1929 y que luego pasó a llamarse hotel Colón.
La planta baja presenta una decoración típica de las casas diseñadas por la escuela de Aníbal González
Un hotel que acaba siendo una casa
A día de hoy, se da la circunstancia de que está a la venta una majestuosa casa en los portales inmobiliarios que por su precio, no está al alcance de muchos bolsillos.
Hablamos de una vivienda situada en el barrio del Porvenir, conocido por ser una de las mejores zonas de Sevilla, que en su momento fue un hotel de aquella Expo del año 29.
Tal y como se puede comprobar en Idealista, estamos hablando de un chalet independiente en la calle Diego de la Barrera cuyo precio alcanza los 1.595.000 euros.
En la descripción se dice que «esta impresionante casa es un ejemplo perfecto de un hotel de la Exposición Iberoamericana de 1929 transformado en vivienda».
Estamos hablando de un inmueble de 470 metros cuadrados con seis dormitorios y cinco baños, más una terraza en la planta ático. Cuenta con cine y gimnasio en la planta sótano y dos plazas de garaje.
Además, la descripción añade que «la planta baja presenta una decoración típica de las casas diseñadas por la escuela de Aníbal González. Los suelos hidráulicos, la escalera con azulejos en las paredes y las molduras son elementos característicos de las casas de estilo regionalista de esa época. Al entrar, encontramos un amplio distribuidor, dos despachos, dos salones y dos habitaciones con un cuarto de baño».
Todo un lujo para vivir en el centro de Sevilla y otro de los resquicios que existen en la ciudad de aquella gran exposición universal de hace casi 100 años.