Muestra de los materiales intervenidos a los ultrasPolicía Nacional

Sevilla

Los ultras del Sevilla y del Betis se citaron para pelearse horas antes del último derbi

La Policía Nacional evitó los enfrentamientos y requisó gran cantidad de armas

La Policía Nacional evitó varios enfrentamientos entre miembros de grupos ultras del Sevilla Fútbol Club y del Real Betis Balompié en la víspera del último derbi, celebrado este pasado domingo en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán.

El operativo que la Policía Nacional pone en marcha con motivo de los partidos considerados de alto riesgo, como era el caso, consiguió abortar dos posibles peleas entre radicales de ambos equipos el viernes y el sábado por la noche.

El pasado viernes día 4, sobre las 22:30 horas, agentes de la Policía Nacional localizaron a un amplio grupo de personas en las calles aledañas al edificio Viapol y pudieron comprobar que estos individuos vestían indumentaria del grupo Supporters Gol Sur, del Real Betis, y estaban en actitud de espera.

Instantes después, estos agentes vieron cómo ultras del grupo Biris Norte, del Sevilla, se estaban aproximando al lugar, procediendo a cubrirse el rostro para evitar ser identificados, último paso previo al posible enfrentamiento violento. Inmediatamente, efectivos de paisano y uniformados de la Policía Nacional consiguieron evitar el enfrentamiento.

La otra intervención ocurrió la noche del sábado en la avenida Reina Mercedes, cerca del Benito Villamarín, estadio del Real Betis Balompié. En esa ocasión, la Policía Nacional redactó propuestas de sanción para más de 30 radicales, según fuentes policiales.

El operativo, que duró todo el fin de semana, se saldó con numerosas personas identificadas de ambos grupos. Además, la Policía requisó una gran cantidad de bengalas, palos, defensas extensibles, pasamontañas y puños americanos. El dispositivo de seguridad contó con un total de 386 agentes policiales, tal como anunció la Subdelegación de Gobierno en Sevilla.

Con esta nueva operación, son ya varias las ocasiones en las que la Policía Nacional hace efectivo el carácter preventivo de los dispositivos realizados con ocasión de los encuentros considerados de alto riesgo por la Comisión Antiviolencia.