La Virgen de la Esperanza Macarena, a su paso por la calle Escoberos de regreso a la Basílica en la mañana del Viernes Santo de 2023

La Virgen de la Esperanza Macarena, a su paso por la calle Escoberos de regreso a la Basílica en la mañana del Viernes Santo de 2023María José López | Europa Press

Sevilla afronta con la Magna una inédita 'mini' Semana Santa en vísperas de la Navidad

El volumen de visitantes que se espera es la equivalente «al triple de personas que acude a Sevilla un Domingo de Ramos, sin la dispersión de los barrios», ha señalado el delegado de Fiestas Mayores del consistorio, Manuel Alés

procesiones magnas como la que tendrá lugar este domingo 8 de diciembre son un acontecimiento extraordinario en Sevilla.

A escasas dos semanas para las fiestas navideñas, Sevilla se prepara ante una inédita 'mini' Semana Santa durante el puente de la Constitución y la Inmaculada: las principales devociones de la provincia procesionarán en un evento que se prevé multitudinario.

El volumen de visitantes que se espera es la equivalente «al triple de personas que acude a Sevilla un Domingo de Ramos, sin la dispersión de los barrios», ha señalado el delegado de Fiestas Mayores del consistorio, Manuel Alés.

Así, ocho de las imágenes religiosas que más devoción arrastran en Andalucía, como la Macarena o el Gran Poder, procesionarán juntas en un macrocortejo que será el colofón del II Congreso de Hermandades y Piedad Popular, una gran cumbre cofrade que se celebra en Sevilla desde este lunes.

Todo ello en una ciudad ya adornada con luces, árboles de Navidad y nacimientos que contrastarán con el incienso y la música de procesiones que son más propias de la Semana Santa.

Valor y arraigo

Esta singular procesión supone el acto de clausura del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular, ideado, como ya se explicó en su momento, para «impulsar la oportunidad que ofrece la religiosidad popular para la Nueva Evangelización ante los desafíos del mundo actual».

La ciudad hispalense congrega con este evento a miles de personas, cuyo número aumentará durante este evento de clausura debido al valor histórico de las imágenes seleccionadas y, sobre todo, al arraigo y a la devoción que todas tienen tanto en Sevilla como en sus comarcas.

Junto a las vírgenes de la Macarena, de la Esperanza de Triana y de los Reyes, y los cristos del Gran Poder y la Expiración, este conocido popularmente como 'El Cachorro', recorrerán el centro histórico sevillano las patronas de las localidades sevillanas de Lora del Río, la virgen de Setefilla; de Utrera, la de Consolación, y de Dos Hermanas, la de Valme.

Los desfiles procesionales comenzarán con la salida de la Esperanza de Triana el próximo sábado a las 15:00 horas. Desde entonces, y hasta que la Macarena regrese a su basílica al alba del lunes día 9, centenares de miles de personas acudirán a la capital hispalense, que prevé doblar su población durante estos días.

Dispositivo sin precedentes

«Sevilla ha echado el resto en esta procesión», ha explicado Alés en la presentación de un dispositivo de seguridad sin precedentes que, en algunos casos, obligará a movilizar «hasta el cien por cien de la plantilla» de la Policía Municipal sevillana.

El ambicioso plan incluye un vallado kilométrico que acotará el recorrido oficial por el que transcurrirán los cortejos, en el que se instalarán 20.931 sillas que sacó a la venta la pasada semana el Consejo de Cofradías sevillano y que se agotaron en apenas tres horas.

Con motivo de este evento, el ayuntamiento habilitará 18.156 plazas de aparcamiento para vehículos particulares y hasta 1.916 para autobuses en distintos puntos de la ciudad, entre los que destacan los terrenos donde se celebra cada año la Feria de Abril.

Desde allí se prestará un servicio de lanzadera con autobuses municipales que acercarán a los visitantes a puntos próximos donde discurrirán las procesiones y que además serán gratuitos durante la jornada del domingo 8.

En total, más de 2.000 agentes entre Policía Municipal, Policía Nacional y Guardia Civil velarán por el normal discurrir de los cortejos procesionales y participarán al mismo tiempo en otro dispositivo paralelo con motivo del encuentro que medirá al Real Betis y al Fútbol Club Barcelona.

Quejas de la patronal hostelera

Nunca llueve a gusto de todos. La Asociación de Hosteleros de Sevilla ha mostrado el «tremendo malestar generalizado» del sector ante las normas dictadas por el Ayuntamiento hispalense, gobernado por el popular José Luis Sanz, para este tipo de negocios, con motivo de la procesión.

Los locales del entorno de la carrera oficial sólo podrán servir al público en el interior de los mismos, «sin superar el aforo permitido», y en aquellos incluidos en la zona restringida de acceso a las sillas «sólo se permitirá la entrada a las personas abonadas».

​La patronal hostelera señala que, en efecto, ante un evento de tal magnitud debe «imperar» la seguridad, pero señala que «está completamente fuera de la realidad pensar que un establecimiento con todo el mobiliario perteneciente a su terraza apilado en el interior puede atender de manera adecuada a los clientes en ese mismo espacio. Precisamente en una zona de la ciudad, el casco histórico, en el que muchísimos de los establecimientos son de escasas dimensiones».

​El alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, ha reaccionado este martes a las críticas de la Asociación de Hosteleros a las limitaciones impuestas al sector, recordando que ante un evento tan multitudinario, «la prioridad es la seguridad ciudadana».

El primer edil se ha pronunciado así ante el comunicado de la patronal hostelera, que ve «inviable» la actividad con las limitaciones dictadas por el Ayuntamiento en el entorno del área afectada por los recorridos procesionales, acometiendo «un sondeo entre los asociados, para saber cuántos de ellos se plantea cerrar el próximo domingo ante tales limitaciones».

​«Tienen que entenderlo, los veladores no pueden estar en la calle», ha dicho, destacando que ante tanta afluencia de público, es necesario «tener los menores obstáculos posibles en la vía pública». «El Ayuntamiento tiene que garantizar la seguridad ciudadana en todo momento», ha remarcado, lanzando un «llamamiento a la responsabilidad» de los hosteleros.
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