Sanxenxo se prepara para recibir al Rey Juan Carlos

Olor a puerto y mucha paz. Eso es lo primero que se respira al llegar a la localidad pontevedresa de Sanxenxo, sita en las Rías Baixas gallegas. También, un inusual buen tiempo muy diferente al del pasado fin de semana, según cuentan los lugareños. Este jueves, el municipio con más plazas hoteleras de Galicia tendrá el honor de ser el primero de toda España en recibir al Rey Juan Carlos, después de casi dos años residiendo ininterrumpidamente en Abu Dabi.

Con un día de adelanto respecto de la exclusiva de El Debate y anunciado ayer a última hora por la Casa del Rey, Don Juan Carlos llega hoy a Sanxenxo.

Aquí se alojará en el chalet de su íntimo amigo y presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo, Pedro Campos. Tal y como él mismo confirmó a este periódico justo antes de partir desde Madrid, esta visita les ha pillado «completamente de sorpresa». Eso sí, desde el pasado miércoles, jardineros y demás empleados del club se han dedicado a adecentar con esmero el lugar donde tantas veces el exjefe de Estado acostumbraba a pasar largas jornadas tras las regatas.

«¿Nadie recuerda todos los millones que ha conseguido para España?», se escucha discutir en gallego a un grupo de trabajadores en una taberna del Paseo Praia de Silgar. El monarca está en boca de todos desde que el alcalde anunciara que vendría a la localidad.

Siendo una coincidencia del destino, este medio se encuentra en el Miradoiro Porto Deportivo Juan Carlos I, un modesto mirador conocido por ser testigo de preciosos atardeceres y situado justo en la entrada del aparcamiento público del club náutico, con Carmen y Ramón. La encantadora pareja de sangenjinos septuagenarios que descansa después de un largo paseo expresa de inmediato que están «encantados de que vuelva» el Rey Juan Carlos.

De hecho, antes de las últimas lluvias ya se ha notado la gran afluencia de personas que han llenado «casi al 90 % los hoteles, no sólo de Sanxenxo, sino también de los alrededores, como en El Grove o La Toja». Respecto al parecer del resto del pueblo sobre el regreso del monarca, el marinero y la ama de casa y modista explican que «habrá a quien le parezca que es un ladrón y para otros, como nosotros, admitimos que ese señor hizo mucho por España y con él se recuerda nuestra tierra a aquellos que dicen que Galicia está medio olvidada».

Una camarera de A Tasquiña, un restaurante en primera línea de la playa de Silgar, explica que «durante los últimos días se va notando cada vez más gente». Evidentemente, por la llegada de Don Juan Carlos y su participación, aunque fuera de espectador, en el campeonato de vela del próximo fin de semana.

Esa paz que se respiraba ayer en Sanxenxo quizás este jueves se vea adulterada por la presencia de medios de comunicación. Una circunstancia no del todo inoportuna para los pequeños comercios, que han visto incrementado el turismo local en los últimos días. La villa gallega, que siempre ocupó un lugar especial en el corazón del padre de Felipe VI, hoy vuelve a recibir su visita y a convertirse en el punto de mira de toda España y de la prensa internacional.