Casa Real
Juan Carlos I consigue la inmunidad en el Reino Unido ante la demanda de Corinna Larsen
La defensa del Rey apeló basándose en que las acciones en su contra pueden afectar al actual jefe de Estado, su hijo Felipe VI
Juan Carlos I, el Rey, es inmune en Reino Unido, lo que significa que no podrá ser juzgado en la demanda que le interpuso Corinna Larsen por supuesto acoso, difamación y seguimiento ilegal, según ha avanzado Reuters.
El tribunal británico que estudiaba la demanda ha entendido que la conducta del Rey era inmune hasta su abdicación en el año 2014. «La conducta previa a la abdicación alegada es inmune a la jurisdicción de los tribunales de este país», considera el tribunal.
Corinna le reclamaba una indemnización por los costes de su supuesto tratamiento médico de salud mental asegurando que había recibido por parte de Don Juan Carlos un seguimiento llevado a cabo por «exdiplomáticos y exfuncionarios del Gobierno» español, por lo que quería llevarle a juicio por «espionaje».
Para los abogados de la ex amiga del Rey, Juan Carlos y el CNI la presionaron y vigilaron ilegalmente, sobre todo desde que ella se negó a devolverle los 65 millones de euros que este le había «regalado», según su versión, previamente en 2012.
Sin embargo, la defensa del Rey apeló basándose en que las acciones en su contra pueden afectar al actual jefe de Estado, su hijo Felipe VI, como miembro que es de la Casa Real española. Además, sus abogados afirmaban que sus acciones en aquel entonces «no pertenecían al ámbito privado», algo que ahora reconoce el Tribunal de Apelaciones de Londres.
Las contradicciones de Corinna
La decisión inicial del juez Mathew Nicklin del pasado 24 de marzo de no reconocer, tal y como alegan los abogados de Don Juan Carlos, que en la época en la que se produjeron los presuntos hechos, el entonces Jefe del Estado estaba protegido por la inmunidad de sus «actos soberanos», llevó a los letrados hasta la Corte de Apelaciones de Inglaterra y Gales.
Así, el pasado 18 de julio, los magistrados británicos autorizaron al Rey a recurrir la decisión inicial del citado juez respecto a los hechos transcurridos entre los años 2012 y 2014, cuando Don Juan Carlos era Rey de España.
La vista oral se celebró el pasado martes 8 de noviembre y se alargó durante algo más de cinco horas, distribuidas en una doble sesión de mañana y tarde.
Allí, el Tribunal analizó la apelación formulada por los letrados españoles en lo que acabó significando un pequeño revés para las pretensiones iniciales de Larsen. No en vano, los magistrados interrumpieron en varias ocasiones al abogado de Corinna para subrayar las contradicciones de su cliente, entre la versión de lo ocurrido reflejada en la demanda presentada inicialmente y la modificación posterior.
Un matiz que los jueces británicos no pasaron por alto.
¿Y ahora qué?
Es decir, que los letrados de la ex amiga íntima de Don Juan Carlos aseguran que el acoso y el espionaje continuó una vez este había abdicado.
Larsen insiste en pedir en su demanda que se la resarza por daños y perjuicios y una orden de alejamiento para el padre del Rey Felipe VI, pese a que nunca trascendió la cuantía de la indemnización económica que exige.
De momento, no hay fecha para ese nuevo juicio, aunque todo apunta a que deberá celebrarse en 2023.