El Rey advierte que no hay democracia sin igualdad entre españoles y respeto a los jueces

El Rey ha afirmado este miércoles en Barcelona que los jueces deben estar «sometidos únicamente al imperio de la ley» y que «la independencia de la Justicia es esencia del Estado de Derecho, y todos han de preservarla y respetarla». Don Felipe ha hecho estas afirmaciones tras la entrega de los despachos a los 160 nuevos jueces de la última promoción de la Carrera Judicial.

El acto se ha celebrado en plena ofensiva del Gobierno, el Congreso de los Diputados y los separatistas a los jueces, y con la ley de amnistía como telón de fondo. Una ley con la que el Gobierno de Sánchez pretende borrar los delitos de sus socios separatistas, y que todas las asociaciones de jueces y fiscales han calificado de inconstitucional.

También son «jueces europeos»

«La independencia del Poder Judicial como institución es imprescindible para el adecuado funcionamiento de nuestra democracia, así como la de cada juez en el ejercicio de su función jurisdiccional», ha insistido el Rey. En otro momento de su intervención ha manifestado que «el respeto a las resoluciones dictadas por los órganos judiciales y la igualdad de todos ante la ley son condiciones indispensables de la democracia».

Y ha recordado a la nueva promoción que también son «jueces europeos», que su labor «resulta imprescindible para asegurar la eficacia y la aplicación del derecho comunitario» y que «las instituciones europeas también estarán atentas» a su función y desempeño.

El Rey también ha defendido la separación de poderes como algo esencial en una democracia, y ha afirmado que, según la Constitución, los jueces han de ser «independientes, inamovibles, responsables y sometidos únicamente al imperio de la ley» y ha recordado a los jueces que es la Constitución la que debe guiar «todas y cada una de vuestras decisiones».

«Sin Justicia y, sobre todo, sin una Justicia independiente, no existiría verdaderamente el concepto de una comunidad política democrática», ha manifestado el Rey antes de recordar a los jueces que «preservar el Estado Social y Democrático de Derecho que proclama nuestra Constitución» es su «principal obligación». Además, ha destacado la importancia de «juzgar y ejecutar lo juzgado».

El Jefe del Estado ha estado acompañado en el acto por el titular de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, como ministro de jornada, quien antes de asistir a este acto ha asegurado en una entrevista que la ley de amnistía que prepara el Gobierno no dejará a nadie fuera.

Bajo perfil de autoridades catalanas

Además del Rey, han intervenido en el acto el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Vicente Guilarte, y el director de la Escuela Judicial, Jorge Jiménez.

A la ceremonia también han asistido el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y el delegado del Gobierno en Cataluña, Carlos Prieto. La Generalitat de Cataluña solo ha estado representada por la consejera de Justicia de la Generalitat de Cataluña, Gemma Ubasart, y el Ayuntamiento, por la vicealcaldesa María Eugenia Gay, ya que el alcalde, Jaume Collboni, canceló su asistencia la víspera para convocar una rueda de prensa a la misma hora.

El acto se ha celebrado en el Auditorio Fórum de Barcelona con amplia presencia policial y ausencia total de público en la entrada. Cuando el Rey ha entrado en el gran salón de actos ha sido recibido por un fuerte aplauso por parte de los asistentes, entre ellos los 160 nuevos jueces (119 mujeres y 41 hombres) y sus familias. Y otro sonoro y largo aplauso se ha repetido cuando Don Felipe ha finalizado su discurso.

Tras la ceremonia, el Rey se ha quedado durante una hora compartiendo un vino y conversando con los nuevos jueces y sus familias, y haciéndose fotos y selfies con ellos.

Don Felipe se ha quedado en Barcelona, donde tenía un almuerzo privado, y esta tarde se sumará la Reina. Juntos inaugurarán la segunda torre T-2 de la compañía Puig en Hospitalet de Llobregat, a donde sí está previsto que asistan autoridades catalanas.