Casa Real
Relevo en la Casa del Rey: mañana cesa Alfonsín y toma posesión Villarino
El diplomático se estrena en una semana marcada por la política exterior y en la que Don Felipe volverá a Barcelona para inaugurar el Mobile World Congress
El nuevo jefe de la Casa del Rey, Camilo Villarino, tomará posesión mañana, lunes, de su nuevo cargo, y ese mismo día se publicará el cese de Jaime Alfonsín, que será nombrado consejero privado de Don Felipe. El Rey quiere seguir contando con su antiguo colaborador, por quien siente un gran afecto forjado a lo largo de tres décadas.
Por primera vez después de 30 años, este abogado del Estado, gallego, discreto, prudente, inteligente y que conoce al Rey mejor que nadie ya no acudirá a trabajar al Palacio de La Zarzuela. Alfonsín no se jubila, pero de momento disfrutará unos días de descanso, tras una etapa larga e intensa.
Y su despacho lo ocupará un veterano diplomático y militar, aragonés, de 59 años, también discreto y leal que, hasta ahora, nunca ha trabajado en la Casa, pero que conoce a Don Felipe desde hace más de veinte años y le ha acompañado en numerosos viajes al exterior.
En su aterrizaje en La Zarzuela, Villarino contará con el apoyo y la ayuda de las otras diez personas que forman el equipo del Rey, pero le será especialmente valiosa la colaboración de dos de ellos.
Uno es Domingo Martínez Palomo, secretario general de la Casa del Rey, quien será su mano derecha en esta primera etapa. Este teniente general de la Guardia Civil lleva 28 años trabajando en La Zarzuela y conoce a la perfección el engranaje de la Jefatura del Estado.
El otro es Alfonso Sanz Portolés, consejero diplomático de la Casa del Rey. Este diplomático, que llegó a La Zarzuela hace 31 años, también ha sido jefe de Protocolo y secretario general. Y, además, es un viejo conocido del nuevo jefe de la Casa, porque el padre de Villarino fue notario en Zaragoza, donde la familia de Sanz Portolés tenía propiedades y negocios.
El relevo que La Zarzuela anunció el pasado 19 de enero se formalizará mañana. Jaime Alfonsín acudió el pasado viernes a su último acto público -el 150 aniversario de la Intervención General de la Administración del Estado- como jefe de la Casa del Rey y, a partir de mañana, será Camilo Villarino quien acompañe a Don Felipe y despache con él todos los asuntos que lleguen a la Jefatura del Estado.
La experiencia acumulada por el diplomático como jefe de Gabinete de tres ministros de Asuntos Exteriores (Alfonso Dastis, Arancha González Laya y Josep Borrell) le será de gran ayuda en su nuevo cometido, pero Villarino encontrará algo en La Zarzuela diferente a cualquier otro destino: trabajará para una Institución, la Jefatura del Estado, y para un jefe, el Rey, pero también para una familia, la Familia Real, integrada por seis miembros, los Reyes, la Princesa de Asturias, la Infanta Sofía, Don Juan Carlos y Doña Sofía.
La etapa de Jaime Alfonsín pasará a la historia por haber ayudado a Don Felipe a sentar los cimientos de una «Monarquía renovada», marcada por una alta exigencia ética y un compromiso de transparencia.
Y a Villarino le tocará servir al Rey en uno de los momentos más delicados de la democracia, porque la Corona está en el objetivo de todos los socios republicanos y separatistas del Gobierno de Sánchez.
Política exterior
De momento, el nuevo jefe de la Casa del Rey se estrenará en una semana con gran actividad de política exterior, ya que Don Felipe recibe mañana al ministro de Relaciones Exteriores chino; el martes visita el Cuartel General Supremo de las Potencias Aliadas en Europa (SHAPE), que está en Mons (Bélgica); el miércoles recibe las cartas credenciales de los nuevos embajadores de China, Mauritania, Jordania, Bosnia y Herzegovina, Cabo Verde y Singapur; y el jueves se reúne con el presidente de Guatemala, a quien después le ofrece un almuerzo acompañado por la Reina.
Además, el Rey regresará a Barcelona el próximo domingo para asistir a la cena del Mobile World Congress e inaugurar el lunes esta feria tecnológica.