Casa Real El Rey Juan Carlos cumple cuatro años de exilio: normaliza sus visitas a España y su relación con Zarzuela
Mantiene comunicación con el nuevo jefe de la Casa del Rey, que le llamó para presentarse en cuanto tomó posesión
Hoy se cumplen cuatro años desde que el Rey Don Juan Carlos decidió abandonar España y trasladarse a Abu Dabi. No fue una decisión libre, sino que fue consecuencia de las presiones del Gobierno de Pedro Sánchez, que exigió a Don Felipe que su padre abandonara el Palacio de La Zarzuela. Ante esa presión, el propio Don Juan Carlos prefirió irse fuera de España hasta que se despejara el horizonte judicial, pero nunca pensó que su estancia en el extranjero se fuera a prolongar tanto.
De hecho, a pesar de sus deseos, expresados una y otra vez, no pudo regresar a España hasta mayo de 2022, cuando se desplazó a Sangenjo para participar en unas regatas en medio de una enorme expectación mediática. Para entonces, su situación fiscal estaba regularizada y la Justicia había archivado todas las investigaciones abiertas. Pero el Gobierno de Sánchez ha seguido pidiéndole explicaciones.
La paradoja de Sánchez
Paradójicamente, cuatro años después, el mismo presidente que consideraba «inquietantes y perturbadoras» las noticias que le llegaban de Don Juan Carlos se niega a dar explicaciones ni a la prensa ni al juez sobre el comportamiento de su esposa, Begoña Gómez, que está siendo investigada por la Justicia por dos presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Hasta el momento, nadie ha exigido a Sánchez que su mujer abandone el Palacio de La Moncloa.
Mientras tanto, Don Juan Carlos ha conseguido normalizar sus visitas a España. Desde que se fue a Abu Dabi ha regresado en doce ocasiones, la mayoría de ellas a Sangenjo para participar en las regatas y a Vitoria para visitar a su médico. Pero también ha viajado a Madrid para asistir a bodas y funerales, y para acudir a la celebración privada de la mayoría de edad de su nieta la Princesa de Asturias. Y recientemente se desplazó a Portugal para almorzar con su hermana, la Infanta Doña Margarita, que está pasando allí el verano.
Relación con la Casa del Rey
También ha vuelto al Palacio de La Zarzuela, al menos, en tres ocasiones. Y mantiene comunicación con el nuevo jefe de la Casa del Rey, Camilo Villarino, quien sustituyó en el cargo a Jaime Alfonsín. Una de las primeras decisiones de Villarino cuando asumió el cargo fue llamar por teléfono a Don Juan Carlos, presentarse y abrir un canal de comunicación.
Además, la pasada primavera Don Juan Carlos alquiló temporalmente un apartamento en Ginebra para estar más cerca de España, acortar sus desplazamientos y facilitar las visitas de sus amigos, sin obligarles a viajar hasta Emiratos Árabes Unidos, donde mantiene su residencia fiscal.
El regreso, pendiente de resolver
De momento, no está previsto su regreso definitivo a España, pero el Gobierno de Sánchez tiene cada vez menos autoridad moral para prohibirlo. A sus 86 años, Don Juan Carlos lleva un anillo inteligente en el dedo corazón de su mano izquierda que le marca parámetros vitales como la frecuencia cardíaca, ya que hace cinco años se le practicó un triple «bypass» aortocoronario.
Cuatro años después de partir a Abu Dabi, la posibilidad de que el Rey que restauró la democracia en España, que frenó un golpe de Estado y que propició la etapa más larga de libertad y prosperidad de la historia, muera en el extranjero sigue generando enorme inquietud.
Don Juan Carlos ya tiene apuntada en su agenda la próxima visita a España, que será en septiembre a Sangenjo y probablemente la más larga de todas porque podría permanecer quince días en ese municipio gallego, donde se siente a gusto y querido.