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El Rey Juan Carlos, en noviembre de 1981EFE

Casa Real  La izquierda manipula las grabaciones del Rey Juan Carlos para intentar cambiar la historia del 23-F

Los comentarios del Rey padre se referían a la discreción de Alfonso Armada, que fue durante casi 25 años su colaborador, en comparación con Sabino Fernández Campo, que estaba «largando» tras dejar La Zarzuela

La izquierda ha creído encontrar un nuevo filón con el que intentar desprestigiar al Rey Don Juan Carlos. Su próximo objetivo es darle la vuelta a lo que fue uno de los capítulos más brillantes de su reinado: la noche que el Rey frenó el golpe de Estado del 23 de febrero de 1981.

Con ese fin, la izquierda está manipulando unas grabaciones realizadas a mediados de los años 90 de una conversación privada entre Don Juan Carlos y la artista Bárbara Rey. Esas grabaciones las ha publicado el digital OK Diario precisamente ahora, treinta años después, y están sirviendo para que no se hable de otros escándalos actuales.

«Las cosas de Sabino»

En esas grabaciones el Rey Don Juan Carlos se queja ante la artista del comportamiento de Sabino Fernández Campo, que había sido destituido recientemente como jefe de la Casa del Rey, y le compara con Alfonso Armada, que antes del golpe de Estado 1981 también fue su estrecho colaborador. El Rey lamenta que Fernández Campo andaba contando interioridades que dañaban su imagen, mientras que Armada no había comentado nunca ninguna intimidad.

«Estoy yo ahora sufriendo las cosas de Sabino», se lamenta Don Juan Carlos ante la artista. «Y palabra de honor, me río, cariño, de Alfonso Armada. Ese ha pasado siete años en la cárcel, se ha ido a su pazo de Galicia y el tío jamás ha dicho una palabra. ¡Jamás! En cambio, éste otro está largando…», añade el Rey.

Armada nunca desveló interioridades

Claramente, Don Juan Carlos se estaba refiriendo a la discreción de Armada respecto a la etapa que pasó junto a él, primero como instructor militar; después como jefe de la Secretaría del Príncipe y, más adelante, como secretario general de la Casa del Rey. Armada estuvo durante casi 25 años muy cerca de Don Juan Carlos, por lo que conocía muchas interioridades del Rey y de La Zarzuela, pero nunca las desveló.

La izquierda, sin embargo, ha querido manipular estas palabras del Rey sobre Armada y las ha sacado de contexto para insinuar que Don Juan Carlos celebra el silencio del militar sobre el golpe del 23-F. De hecho, tras oír estas grabaciones, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha pedido al Gobierno, que desclasifique toda la información disponible sobre el golpe de Estado: «Esos audios revelan que hay mucho por saber todavía del 23-F», ha afirmado Belarra.

El Rey Don Juan Carlos con el presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, al día siguiente del golpe de Estado del 23-F de 1981EFE

En la grabación, Don Juan Carlos continúa hablando de Fernández Campo: «Se inventa cosas con periodistas de vida privada, de vida económica, de vida tal. ¡Uy, la de cosas que está diciendo!».

Además, añade que «en reuniones donde me critican y hablan de mí y de mi vida y de cosas, inventan y tal y, entonces, él está presente y, en vez de cortarlo, dice: `Bueno, si yo hablara, si yo dijera… Pero, claro, como yo no puedo hablar por mi lealtad, por mis años en la Casa´». "Y eso es peor que si lo dijera», concluye el Rey.

Sabino fue la sombra del Rey

Sabino Fernández Campo, conde de Latores (Oviedo, 1918-Madrid, 2009), fue secretario general de la Casa del Rey entre 1977 y 1990, y jefe de la Casa del Rey entre 1990 y 1993. Su papel más destacado lo tuvo la noche del 23-F, cuando el Rey se enfrentó a los golpistas y Fernández Campo acuñó la famosa frase «ni está ni se le espera», en referencia al general Armada.

«Mi papel se redujo a estar al lado del Rey, atender los teléfonos cuando Su Majestad no podía, por la gran cantidad de llamadas que se produjeron, y mantener hasta el final, de acuerdo con las instrucciones del Monarca, una decisión que se tomó desde el primer momento...», afirmaba.

Fernández Campo supo que Don Juan Carlos ya no contaba con él el 29 de diciembre de 1992 en el restaurante Horcher de Madrid, donde los Reyes le habían citado. Al final de la comida, Don Juan Carlos comentó a la Reina: «Sofi, ¿sabes que Sabino nos deja?» Y así se enteraron la Reina y Sabino.