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La Reina Sofía, el viernes de la semana pasada en los premios Princesa de AsturiasGTRES

Casa Real  Doña Sofía, la Reina más longeva de España cumple 86 años y sigue en activo

La madre del Rey vive centrada en su familia, su fundación y la Corona, al margen de las noticias que se han publicado sobre Don Juan Carlos

Para la Reina Doña Sofía, este sábado tendrá 29 horas, porque amanecerá en Madrid y se acostará en Nueva York. Será uno de sus cumpleaños más largos pero, como España entera, no tiene mucho ánimo para celebrarlo. Está «consternada» por la catástrofe de la DANA. Ella fue una de las primeras en reaccionar. En cuanto tuvo conocimiento de la tragedia, donó 50.000 euros a través de su fundación al Banco de Alimentos, difundió el número de la cuenta a la que hacer donaciones y empezó a agitar conciencias.

Doña Sofía ha conocido de cerca el horror de las grandes catástrofes naturales, como los terremotos de su Grecia natal o la riada de Biescas, en la que murieron 87 personas, pero nada como la de ahora.

Con esa pena en el corazón, Doña Sofía recibirá hoy las felicitaciones por su cumpleaños en La Zarzuela y después cruzará el Atlántico para entregar el lunes el Premio Sophia a la Excelencia al músico venezolano Gustavo Dudamel.

La mayoría de las personas de su edad –hoy cumple 86 años– llevan veinte años retiradas de la actividad profesional, pero Doña Sofía ni sabe ni quiere parar. Ella misma lo dice: «Es importante tener la mente ocupada para seguir bien». Son sus colaboradores del Palacio de La Zarzuela los que intentan frenarle un poco el ritmo, porque si fuera por ella haría muchas más cosas de las que hace.

Querida allá donde va

Con un enorme sentido del deber, ella siempre ha estado en su sitio, aunque los demás no lo estuvieran. Y también ha estado dispuesta a sacrificar su plan personal para acudir a donde hiciera falta. Por eso, durante casi medio siglo, ha sido la primera en llevar consuelo cada vez que ha ocurrido una tragedia, ya fuera una catástrofe natural, un accidente o un atentado terrorista, hasta que pasó el relevo a los Reyes. Los españoles lo saben, se lo agradecen y ella se siente muy querida allá donde va.

Además, Doña Sofía es una Reina muy especial, porque se la ve igual de cómoda representando a España ante otro país, con vestido largo, tiara, joyas y condecoraciones, que visitando los bancos de alimentos o recogiendo basura del mar o de la ribera del río Manzanares.

Su idea de la Monarquía

Hija, hermana, esposa, sobrina, nieta y madre de Reyes, Doña Sofía sabe muy bien en qué consiste el oficio de reinar, y su idea de la Monarquía es que no basta con estar, con representar, sino que también hay que hacer. Así lo aprendió ella de niña, cuando acompañó a su madre, la Reina Federica, a recorrer una Grecia devastada por las guerras y los terremotos para socorrer a los niños huérfanos.

A ella lo que de verdad le importa es aprovechar el lugar en el que la ha puesto el destino para tratar de ayudar al que más lo necesita. Y eso lo hace a través de la Fundación Reina Sofía, que ella misma fundó hace 47 años con una aportación personal. Desde entonces, la fundación ha mejorado la vida de miles de personas en España y en el resto del mundo. Y, en cuanto se detecta una situación de necesidad, aparece la fundación, como ha hecho esta misma semana con la DANA.

Admira a la Princesa

Doña Sofía vive centrada en su familia, su fundación y la Corona, al margen de las viejas noticias que se han publicado días atrás sobre Don Juan Carlos. Más que en el pasado, vive en el presente y en el futuro. Por eso, reconoce que los españoles hemos tenido mucha suerte con la Princesa de Asturias y, como a ella nunca le ha gustado pronunciar discursos, admira a su nieta por lo bien que lo hace.

Así lo comentaba el pasado fin de semana en Oviedo durante la entrega de los premios Princesa de Asturias, una ceremonia a la que -recordó- solo ha faltado una vez en su vida «por una gripe» cuando Don Felipe era muy joven.

Dice que «la pena de hacerse mayor es que pierdes a muchos seres queridos, pero también ganas a los que llegan». Y su actitud ante la vida siempre es optimista. Ella procura disfrutar de todo, aprender y seguir abriendo su mente. Cuando mira hacia atrás, es consciente de que ha tenido una vida muy llena como Reina de España que le ha permitido hacer lo que más le gusta: ayudar, ayudar y ayudar.