Cataluña ERC se plantea sustituir a Maragall como candidato a la Alcaldía de Barcelona
Borras pone las cosas difíciles para el desembarco de Xavier Trías y plantea primarias para elegir candidato
La guerra entre ERC y Junts per Catalunya cruza la plaza de Sant Jaume y se propaga al Ayuntamiento. Las heridas abiertas en el seno del Gobierno de coalición independentista tras los reproches entre los líderes de ERC y Junts con motivo de la no asistencia de Pere Aragonès a la manifestación de la Diada se han complicado más con las peticiones de diversos sectores de Junts, liderados por Carles Puigdemont, Laura Borràs y Quim Torra, de abandonar el Gobierno regional.
Frente a este sector, que defiende la retirada de las instituciones para marcar un perfil más diferenciado de ERC, otros ámbitos de Junts liderados por el exbanquero Jaume Giro, consejero de economía, y Xavier Trías, candidato in pectore a la Alcaldía de Barcelona, defienden la necesidad de mantenerse dentro del Consell Executiu. Las espadas están en alto y en un partido tan fragmentado como Junts cualquier decisión es posible.
La posibilidad de que Junts abandone el Gobierno causa inquietud en ERC dado que los de Aragonès y Junqueras no quieren entregarse en brazos del PSC, que se ha ofrecido repetidas veces para apoyar al Govern. El pacto de gobierno ERC-PSC facilitaría el discurso de Junts y la ANC de que ERC ha renunciado a la consecución de la independencia.
La proximidad del aniversario del 1 de octubre, fecha de la convocatoria en 2017 del referéndum ilegal, sería un momento emocionalmente propicio para que Junts anunciara su ruptura con los «tibios» republicanos. Ante esta posibilidad, ERC se está reforzando para evitar perder el papel de principal partido dentro del bloque independentista, posición que le costo décadas conseguir y que ostenta por una exigua diferencia de solo 35.000 votos por encima de Junts.
En ERC quieren conseguir buenos resultados en el área metropolitana de Barcelona, feudo tradicional del PSC, y por eso preparan candidaturas como la de Gabriel Rufián a la Alcaldía de Santa Coloma de Gramanet, pero sobre todo en el cuartel general republicano se han encendido todas las alarmas por la posible candidatura de Xavier Trías (ex alcalde de Barcelona) al frente de la lista de Junts. Trías ha dicho que en octubre anunciara su decisión definitiva pero en Barcelona todo el mundo da por descontado que se presentará para intentar recuperar la Alcaldía que perdió en 2011 a manos de Ada Colau.
Maragall no despierta entusiasmo en ERC
En ERC hay muchas voces que critican el bajo perfil de oposición ejercido por Ernest Maragall frente a Ada Colau estos cuatro años, asimismo creen que la figura de Maragall está quemada porque desde la dirección de ERC le han obligado a apoyar a Ada Colau en votaciones clave como las ordenanzas fiscales a cambio de que los diputados de Colau en el Parlament dieran su voto favorable a las cuentas de la Generalitat. Asimismo, desde ERC se cree que Maragall, que en mayo de 2023 tendrá 80 años, no está en condiciones de afrontar una campaña y mucho menos otro mandato municipal.
Discretamente en ERC, a pesar de que Maragall fue elegido en primarias en mayo de este año, han abierto un casting sobre posibles sustitutos para frenar un trasvase de voto «útil» independentista de ERC hacía una lista de Junts encabezada por Trías. Elisensa Alamany, procedente del partido de Colau y que en 2019 ocupó el segundo lugar de la candidatura de Maragall, está descartada dado que no ha conseguido integrase dentro de ERC y casi cuatro años más tarde sigue siendo vista como un personaje ajeno a su partido.
Trías con obstáculos dentro de Junts
Xavier Trías ha pedido a su partido manos libres para organizar su equipo y la candidatura como condición sine qua non para presentar su candidatura, pero Laura Borràs recela de Trías, que pretende llevar a cabo una campaña en la que escondería, provisionalmente, su condición de independentista, para presentarse como candidato 'anticolau'.
El objetivo de Trías es no generar rechazo entre votantes constitucionalistas y socialistas hartos de la degradación de Barcelona experimentada por la Ciudad Condal durante los ocho años de gobierno Colau-PSC, y sumar esos votos prestados al votante natural e independentista de Junts. Los poderes fácticos tradicionales de Barcelona como las patronales, entidades financieras, grupos de comunicación y otros grupos de poder ya han hecho llegar a Trías su entusiasmo y apoyo incondicional ante su candidatura.
Borràs, presidenta de Junts, no está dispuesta a desdibujar el perfil reivindicativo de Junts y presentará batalla mediante el intento de celebración de primarias entre la militancia de Junts en Barcelona con un candidato afín a sus tesis. Trías ya informo a su partido que solo aceptará la candidatura por aclamación y no está dispuesto a enfrentarse a ningún militante de su partido en una elección interna.