Cataluña
Daniel Esteve: «Nos han contratado ya en más de 80 países, gente que tiene en España su segunda residencia okupada»
Reta a la ministra Belarra a que acabe con la okupación ilegal si quiere que desaparezcan empresas como Desokupa
Daniel Esteve nació en Barcelona en 1970. Estudió Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, y cuenta con una segunda carrera, según ha explicado en alguna ocasión. Además, habla cinco idiomas. También tiene formación como agente de seguridad. Fue en 2016 cuando creó oficialmente Desokupa, la empresa especializada en echar a okupas y que ya lleva más de 8.000 desocupaciones «y sin ninguna condena», precisa. Asegura que la legislación en España está provocando que se hagan millonarios, aunque eso sí, lamenta que exista una empresa como la suya: «Algo no se está haciendo nada bien», explicaba a El Debate.
–Desokupa está en el ojo del huracán a raíz del intento de desalojo de las dos casas okupadas en la Bonanova. Hasta la ministra Ione Belarra ha puesto sobre la mesa una reforma legal para perseguir a las empresas que se dedican a desokupar.
–A la señora Belarra no le ha durado su propuesta ridícula ni 24 horas, porque la han rechazado el mismo PSOE, el PP y Vox, con lo que el recorrido de lo que iba a ser una medida inconstitucional, no ha durado apenas nada. Pero, ¿quiénes son los partidos que atacan, sólo con titulares, a Desokupa? Esas barbaridades de las que nos acusan no tienen ni soporte documental, ni hay una sola condena en ocho años y medio de desokupaciones, porque llevamos más de 8.700 y ni una sola condena. ¿Por qué nos atacan? Porque la gente que sacamos en estas desokupaciones se ha demostrado que no son familias con niños, como por ejemplo, los okupas de la Bonanova, que persiguen a los vecinos con hachas, les agreden, roban el teléfono a niños de 12 años; o de Majadahonda, el grupo de magrebíes que salió con cuchillos apuñalando a un vigilante y que nos tiró televisores, piedras, palos, cuchillos; o el caso de una mujer mayor en Madrid, a la que unos africanos, además de okuparle la vivienda, le robaron en su casa. Y nos atacan por eso, porque sacamos de esas viviendas a sus votantes. No hay más secreto.
–También el Ayuntamiento le ha denunciado por delito de odio en la protesta de la Bonanova
–¿Quién es la alcaldesa de Barcelona? Una señora que es pro-okupación. Ha sido okupa. Y no sólo la fomenta, es que también los subvenciona, les paga la luz, les cede el local... Por eso tampoco nos sorprende que alguien que está a favor de la okupación y que muchos de sus votantes son okupas, nos intente condenar con una denuncia falsa. Pero al final, da igual. La archivarán. Y lo único que consiguen es darnos una publicidad, sobre todo en el último mes, que es impagable.
–¿Por qué?
–Te pongo un ejemplo. Estamos con 300 llamadas de teléfono diarias, más correos electrónicos y más mensajes. Eso va para la señora Montero, que dice que la okupación no existe. Pues bien, en esta semana, sólo en tres días, hemos contratado 36 viviendas para desokupar. La semana pasada, 56. Los números hablan por sí solos. La okupación existe y la dejadez del Gobierno y que no faculta a las Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado, que son los que tendrían que hacer este trabajo, ha provocado que hayamos encontrado un vacío legal y estamos ayudando a ciudadanos a recuperar lo que es suyo. Ante el anuncio electoralista de Belarra pensé: si quieres acabar con las empresas de desokupación en España, no hacen falta cambios legislativos para acabar con estas empresas, sino para acabar con la okupación ilegal. Pero no lo van a hacer nunca porque esos son sus votantes.
–Si Desokupa está ahora de plena actualidad es por el intento de desalojo de la Bonanova, de echar fuera a unos okupas que llevan ya años en esos edificios, sin que la administración haya dado una solución.
–Por eso intentamos ayudar a esos vecinos y comerciantes, además de forma gratuita. Ya lo dijimos: vamos a intentar desalojar con un control de acceso, formado por 20-25 vigilantes. Lo que pasa es que Mossos d'Esquadra no nos lo autorizó, y al final, manda la policía. ¿Y qué hicimos cuando no pudimos montar el control de acceso? Al día siguiente fuimos con nuestros abogados al juzgado de guardia a pedir una medida cautelar extraordinaria, que, recuerdo a la gente, todavía no se ha rechazado. Está en el Juzgado de Instrucción número 20 de Barcelona. Aportamos apoyo gráfico. Al menos conseguimos que se movilizaron todos los vecinos para protestar contra esa okupación. Hicimos lo imposible. Falta por ver si esa resolución del juzgado de guardia es favorable o no. Pero ojo como diga que sí.
Extranjeros con casas okupadas
–Usted decía que les están dando publicidad, pero es que la problemática de la okupación ilegal en España ya está traspasando fronteras. Medios de comunicación extranjeros ya se hacen eco de la situación.
–A nosotros nos han contratado ya en más de 80 países fuera de España, gente que tiene aquí su segunda residencia. Hace dos semanas desokupamos en Ibiza, con una medida cautelar, un chalé, una villa okupada a un fiscal de Londres. De ahí salió la noticia del medio británico. Hemos recuperado casas de gente extranjera en Mallorca, en Menorca, en Ibiza muchísimo, también en Marbella o Cataluña. Porque se ven afectados por este tipo de okupaciones. Tenemos ya protocolos de actuación montados con varios consulados. Claro que saben lo que pasan en otros países con España. Es que es una vergüenza y esto tiene que correr como la pólvora. Estos señores que dieron la noticia han contactado para hacer con nosotros un documental sobre la okupación, y ya están diciendo que no compren en España más propiedades porque se las okupan y no las pueden recuperar. Hay gente que va a dejar de invertir en España por culpa de esto.
–Por cierto, los okupas de la Bonanova han convocado una manifestación para el martes, aunque hacen un llamamiento a todo el mundo, no sólo okupas, también el colectivo LGTBI, feministas y antifascistas, dicen.
–Es un llamamiento ridículo. Han hecho ahora esta convocatoria el martes, a todo tipo de colectivos, porque el otro día hicieron el ridículo. Fueron sólo 250, además delincuentes, porque iban tapados con capuchas y pasamontañas. ¿Y por qué lo hacen? Fácil, para cometer un delito, porque luego se enfrentaron a la policía, rompieron cajeros, quemaron motos o destrozaron comercios. Mientras que, en el otro lado, había personas a cara descubierta y ni una papelera se tiró al suelo. Es la diferencia entre el bien y el mal, el bueno y el malo, los okupas y los ciudadanos. Y ahora han convocado a todo tipo de colectivos porque están solos. Pero otro empresario ha convocado otra manifestación el próximo jueves, día 25, a las 21 horas en plaza Universidad, para que la gente chequee cuánta va a la una y cuánta a la otra. Es una manifestación en contra de Ada Colau. Se van a personar vecinos, comerciantes, hosteleros, moteros. A ver cuánta gente hay el martes, y cuánta el jueves.
–¿Y cuál es e perfil de cliente de Desokupa?
–El 85 % son particulares y el resto, empresas o patrimoniales. En Desokupa mediamos con inquilinos morosos, pero sobre todo, estamos especializados en la okupación delictiva, como ya se pudo ver en la Bonanova o en Majadahonda. Gente mala, con cuchillos, que trafican, que amenazan a vecinos, que agreden, que destrozan las fincas, producen insalubridad... Ese tipo de desokupaciones son las que nosotros hacemos.
–¿Y cómo lo hacen?
–Hay suficientes vídeos para explicar cómo se hace, y llevamos más de ocho años. Trabajamos con el control de acceso. Cuando un ocupa comete delitos en una finca, se pone el control. Y en el momento en que ellos salen, nosotros no les dejamos entrar. Si ellos no están de acuerdo con esta actuación, pueden ir a un juzgado a denunciar. Y entonces será un juez el que diga si estamos cometiendo una ilegalidad o no. En cualquier caso, lo triste, es que en España, haya una empresa como la mía.