El presidente de la Generalidad, Pere Aragonès,Europa Press

Cataluña

Aragonès presentará hoy sus cinco opciones para convocar el referéndum de autodeterminación

El informe consta de 69 páginas y responde a las cuestiones que había planteado el presidente catalán

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ya tiene el informe que encargó a un grupo de expertos para que le sirva de guía en la configuración de su Acuerdo de Claridad para el referéndum sobre la independencia de Cataluña. El informe consta de 69 páginas y responde a las cinco cuestiones que había planteado el presidente catalán. Los expertos dejan claro que cualquier propuesta se debe basar en «un gran acuerdo político», no sólo entre gobiernos, sino también «entre actores políticos en Cataluña».

En concreto, estas preguntas hacían referencia a qué características debe incluir un acuerdo de claridad con «el Estado español para resolver el conflicto político»; también qué mecanismos existentes en la política permitirían aportar soluciones al conflicto político; qué actores políticos e institucionales tendría que tomar la iniciativa para implementar estas soluciones; qué función debería tener un referéndum sobre el futuro político de Cataluña u otros mecanismos análogos a la hora de resolver el conflicto político; y qué características tiene que cumplir un referéndum u otros mecanismos análogos para resolver el conflicto.

Cinco opciones

Pero yendo en concreto a la cuestión sobre cómo debería ser el referéndum u otros mecanismos, el comité pone sobre la mesa cinco opciones. La primera sería una consulta en Cataluña sobre la conveniencia de que el Parlament apruebe iniciar un proceso de reforma constitucional, que podría contemplar la independencia o «una nueva acomodación en el seno del Estado».

Una segunda propuesta recoge que la consulta se lleve a cabo sólo en Cataluña, pero eso sí, que haga referencia a un acuerdo previo entre la Generalitat y el Estado, ya sea sobre la propia independencia, o sobre otro tipo de encaje. Sería una consulta de «ratificación».

El tercer punto recoge una consulta en toda España, para que los ciudadanos se pronuncien sobre si estarían de acuerdo en que se autorizara un referéndum en Cataluña sobre la independencia.

La cuarta propuesta también incluye una consulta en toda España, que serviría, en este caso, para «aprobar por parte de la ciudadanía del Estado los términos de la independencia y/o una nueva acomodación en el seno del Estado acordados por los representantes».

Y la última es una mezcla de las anteriores, porque recoge una consulta en Cataluña y en el resto de España. Sería, en definitiva, una «combinación doble de referéndum en Cataluña y el Estado con las potenciales combinaciones que podría tener».

En cualquier caso, el presidente del Consejo Académico por el Acuerdo de Claridad, Marc Sanjaume-Calvet, considera que las opciones que pueden tener una mejor salida son las que pasan porque sólo se vote en Cataluña (por lo tanto, dos de las propuestas).

Por lo demás, ha precisado que lo más probable es que la pregunta de la consulta «sea binaria» y que los posibles cuórums o mayorías también se pacten, aunque reconoce que esta cuestión puede tener «riesgos», porque se «puede lesionar el principio de igualdad de voto» o en otros casos, se puede «fomentar cierto boicot y favorecer la abstención».

El presidente de la Generalidad, Pere AragonèsEFE

Fórmula acordada

Sobre las propuestas, SanJaume-Calvet ha explicado que «no son propuestas que estrictamente hacemos nosotros, sino que en algún momento han sido formuladas por algunos de los actores implicados». En cualquier caso, ha dejado claro que el mecanismo general se tiene que basar en la búsqueda de «una forma acordada en la resolución del conflicto, asumiendo que hay pareceres muy diferentes».

Por otro lado, este Consejo «recomienda» la figura del mediador internacional, aunque no la considera «indispensable». También considera que el Tribunal Constitucional debería tener un «papel de árbitro» y no de «obstaculizador».

Esta suerte de consejo de sabios, está formado también por la profesora de Derecho Constitucional de la Universidad de Barcelona (UB) Mar Aguilera; por la catedrática de Ciencia Política de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) Eva Anduiza; el profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Girona (UdG) Marco Aparicio; el Profesor de Estudios de Derecho y Ciencia Política de la Universidad Oberta de Catalunya (UOC) Pau Bossacoma; Elisenda Casañas, profesora de Derecho Constitucional en la Universidad de Edimburgo; la investigadora del Instituto Barcelona de Estudios Internacionales (IBEI) Lesley-Ann Daniels; el profesor de Filosofía del Derecho i Política de la UPF Josep Lluís Martí i la profesora de Ciencia Política a la Universidad de València (UV) Astrid Barrio.