La comunidad judía de Barcelona denuncia que el Ayuntamiento va contra ellos

La comunidad judía de Barcelona dice sentirse triste, decepcionada y asombrada por el hecho de que el Ayuntamiento de Barcelona haya aprobado una resolución que «lo único que hace es polarizar y dividir». Y es que con el voto a favor de comunes, PSC y ERC, se ha dado luz verde a interrumpir las relaciones institucionales con el gobierno de Israel «hasta que no haya un alto el fuego definitivo y se garantice el respeto a los derechos básicos del pueblo palestino y el cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas respecto al conflicto». Trias por BCN, PP y Vox han votado en contra.

Pero no sólo se rompen relaciones, sino que, además, en el texto se pide establecer una cláusula en todos los contratos públicos que garantice que «ningún operador pertenece o realiza» operaciones financieras y actividades económicas «que vayan en contra del derecho internacional humanitario».

Y para la comunidad judía, este texto «de confrontación» no ayuda a resolver el conflicto, y «cuando llama al boicot a las empresas israelíes, por el mero hecho de serlo, entra de lleno en el antisemitismo sofisticado iniciado por la anterior alcaldesa». Pero es que, además, recuerdan que PSC, ERC o comunes nunca han votado alguna iniciativa en contra de Hamás. Y, en cambio, añaden, «lo han votado contra los judíos de Barcelona, contra el pueblo judío y contra el Estado de Israel».

Es lo que se recoge en un comunicado que ha hecho público la Federación de comunidades judías de España (FCJE) y la comunidad judía de Barcelona, entidades a las que pertenece Isaac Levy, que también es presidente de LICRA, la Liga Internacional contra el Racismo y el Antisemitismo.

Levy, en declaraciones a El Debate, ha dicho sentirse «muy triste» porque el gobierno de la ciudad ha «comprado el relato de sólo una parte». Podemos entender los judíos, explica, que «se solidaricen y comprendan el sufrimiento del pueblo palestino, pero tienen que entender también el sufrimiento de la sociedad israelí, porque fue víctima de un atentado que nos dejó en estado de shock». Y añade Levy: «Israel tiene derecho a defenderse y atacar a los terroristas, no a la población civil, que es lo que ha hecho Hamás, que usa como escudos humanos a mujeres y a niños».

Comprar el relato de una parte

Pero Levy también ha dicho sentirse muy decepcionado, porque creían que «era pantalla pasada» la política de la anterior alcaldesa que, recordemos, por iniciativa propia y vía decreto de alcaldía, decidió romper relaciones con Israel, al que acusó, además, de practicar el Apartheid. Recientemente, el gobierno municipal, encabezado ahora por el socialista Jaume Collboni decidió retomar esas relaciones. Hasta este viernes.

Levy cree que el PSC ha cambiado de opinión en el ayuntamiento por «presiones de Pedro Sánchez y del aparato del PSOE en Madrid, que, a su vez, están influenciados por sus socios de gobiernos de Sumar. Y estos sí que son totalmente antisemitas, anti israelís y anti judíos». Aunque Isaac Levy recuerda que no sólo es Sumar, sino que, por ejemplo, la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha declarado su apoyo explícito a la causa palestina.

Para el presidente de LICRA, el antisemitismo y la judeofobia «van cada día a más». Y también ha dicho que la comunidad judía está «preocupada» porque, entre otras cuestiones, «nadie puede enseñar símbolos judíos en la calle, y vemos que las instituciones tampoco nos apoyan». Y esta situación se debe, añade, a que hay una «izquierda catalana, de CUP, ERC y comunes, que son muy beligerantes con Israel y con el pueblo judío. Y la anterior alcaldesa, Ada Colau, es quien ha comandado esta ultraizquierda», apunta Levy.

La actitud de Sánchez «duele» en Israel

Pero si como barcelonés se siente dolido por la decisión del Ayuntamiento, como español, por la actitud del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Es normal, asegura, que en Israel «estén escandalizados por todo lo que está diciendo. No puede ir a un país con el dolor que ha sufrido, a dar lecciones, y encima, viene a justificar al terrorismo. Eso sí que duele en Israel».

Y añade: «no viene a cuento estar ahí de visita oficial y montar una rueda de prensa, totalmente fuera de lugar, justo en el momento en que se intercambian los rehenes. ¿Para qué? ¿Para hacerse la foto? Es indignante. Y encima, para lo que ha dicho. Tenía que haber condenado a Hamás y no lo ha hecho. Por eso los israelís están tan indignados».

El presidente de LICRA recuerda que con anterioridad en España ha habido gobiernos socialistas, pero nunca «habían tenido tanta beligerancia contra Israel y el judaísmo como éste». Una actitud que atribuye, en parte, a la presión de los socios de coalición, pero también a «la propia personalidad» del presidente del Gobierno.

«Blanquear la barbarie», dice la embajada de Israel

Por otro lado, la embajada de Israel en España ha acusado al gobierno municipal de Barcelona de «blanquear la barbarie» de Hamás con su decisión. De hecho, ha condenado «enérgicamente» la resolución aprobada por socialistas, comunes y republicanos, que configura, dicen, «un nuevo episodio de la actitud anti israelí del Ayuntamiento de Barcelona». Desde la embajada también aseguran que tienen «muy presente» que el Ayuntamiento «no ha condenado los brutales asesinatos ni los secuestros de niños, madres, ancianos y civiles inocentes».