Sánchez insiste en que PP y Vox son la «máquina de fango»: «A Feijóo y Abascal no se les distingue»

«A Feijóo y a Abascal ya no se les distingue: comparten políticas, insultos y bulos… y hasta el mismo ideólogo de cabecera, José María Aznar» ha criticado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su segundo acto electoral en la campaña del 12-M, este sábado en Montmeló. El secretario general del PSOE ha protagonizado un mítin en clave nacional, en el que ha insistido en identificar a los partidos de derechas con la «máquina de fango».

«La máquina de fango te dice que si quieres hacer política, mejor en el PP o en Vox: ahí da igual lo que hagas, prosperarás… pero si lo haces en otros partidos, iremos a por ti», ha dicho Sánchez, y ha añadido, con gesto grave: «Pretenden convertir la democracia en territorio exclusivo de los poderosos».

Frente a un público con gorros de paja para soportar el sol que caía a plomo, Sánchez se ha querido anotar un tanto con el informe de la ONU sobre las leyes de concordia tramitadas por PP y Vox en varias Comunidades Autónomas, diciendo que este «ha puesto al PP de Feijóo frente al espejo, y este ha visto al Vox de Abascal». Abundado en la narrativa que ha arrastrado toda la semana, Sánchez ha querido enmarcar las investigaciones a su mujer como una persecución política por sus acciones de gobierno.

«No me hostigan por llamarme Pedro Sánchez, sino por ser el secretario general del partido que ha subido el salario mínimo y revalorizado las pensiones, y que situó la causa del feminismo como causa nacional», ha dicho, cargando la culpa del «hostigamiento» en unos «poderes», en abstracto, «a los que les molesta que haya un Gobierno que reconozca el Estado palestino», entre otros logros que ha citado.

“'Salva', gestionamos juntos"

En clave catalana, Sánchez se ha presentado como escudero del candidato socialista a la Generalitat, Salvador Illa. «Salva, gestionamos juntos la pandemia y la vacunación, y gestionaremos juntos la convivencia y el avance de derechos en Cataluña y en España», le ha dicho.

También ha señalado que «fueron dos presidentes de derechas, en La Moncloa y la Generalitat, los que llevaron a la quiebra a Cataluña», y ha defendido que «dos presidentes socialistas» serán los garantes de «la prosperidad, los derechos y la convivencia» en la comunidad. Además, Sánchez ha pedido una «mayoría amplia», frente a los otros partidos, que –a su juicio– llevan «al bloqueo, a la parálisis, a la incertidumbre y la inestabilidad».

Illa, en casa

Por su parte, Illa abrió su discurso en clave personal: «Es un acto especial para mí, porque se hace en Montmeló, en mi comarca: aquí nací yo, físicamente y políticamente», ha dicho, recordando su etapa como concejal y alcalde de La Roca del Vallés, su pueblo natal. También dirigió la ya habitual loa a Sánchez: «En mi tierra, te quiero decir que estamos contentos de que sigas al frente del Gobierno de España».

Intercalando catalán y castellano, ha insistido en su idea de que Cataluña ha vivido una «década perdida», en la que «pudiendo llevar el coche a 120 km/h hemos ido a 30», y ha cargado contra los gobiernos de Mas, Puigdemont, Torra y Aragonès: «Llega una sequía y no se ha hecho nada, y en educación hemos pasado del primer puesto a la cola», ha lamentado.

Illa ha defendido «las políticas que han devuelto la convivencia a Cataluña», en referencia a la ley de amnistía, y ha insistido en que ahora «es momento de estar unidos, de subrayar aquello que nos une y no poner el acento en aquello que nos separa». También ha destacado una de las medidas de su programa: una ley de barrios, en la que ha prometido que invertirá 800 millones de euros en cuatro años si es presidente de la Generalitat.

Han ejercido de teloneros del acto el alcalde de Montmeló, Pere Rodríguez –que se jactó de haber conocido a los otros tres ponentes «como militantes»–, y la número 22 del PSC por Barcelona, Conchi Jiménez, que ha loado a Illa como un político que «prioriza el bienestar de la ciudadanía por encima del interés partidista» y ha agradecido a Sánchez «todo lo que ha hecho por Cataluña». «Muchas gracias por seguir, te necesitamos», añadía.