Hospital Valle de HebronHospital Vall d'Hebron

Sanidad

Cataluña recorta en Sanidad en verano: un 25 % menos de camas en Vall d'Hebron y sin sustituciones en los CAP

  • La asociación El Defensor del Paciente considera que se está poniendo en «peligro» a la ciudadanía y llevará los recortes a la Fiscalía

  • La Generalitat asegura que hay más recursos para Sanidad este año

El hospital más grande de Cataluña, el Vall d’Hebron de Barcelona, cerrará este verano 270 camas, o lo que es lo mismo, una cuarta parte del total, y también reducirá al mínimo la actividad quirúrgica. De hecho, durante los meses de julio, agosto y septiembre, se retrasarán algunas cirugías programadas no urgentes. No es una cuestión nueva, que se reduzca la actividad durante los meses de verano, pero es que estas reducciones son mucho mayores que en años anteriores. Y los CAP también van a sufrir las consecuencias de la falta de recursos, porque no se va a renovar los contratos del personal temporal, ni se va a poder contratar personal para suplir a los que se vayan de vacaciones.

Pero no es solo el Vall d'Hebron. Otros hospitales van a cerrar centros satélites. Es el caso del Clínico, que cerrará en agosto la clínica Platón; o el Hospital del Mar, que hará lo propio con la Esperanza. Y los recortes no van a afectar exclusivamente a los centros sanitarios de la provincia de Barcelona. También reducirán actividad el Josep Trueta de Gerona y el Arnau de Vilanova en Lérida.

¿Y por qué se ha tomado esta decisión? Por falta de recursos. Desde el Govern lo atribuyen, por un lado, a la prórroga presupuestaria, aunque aseguran que se ha pedido un crédito para este año. Y recordemos que la negativa de los Comunes a aprobar las cuentas de la Generalitat provocó, en última instancia, el adelanto electoral. Y a esto hay que añadir que la gerencia del Vall d’Hebron arrastra otro problema: calculó mal las subidas salariales acordadas con los sindicatos, porque no tuvo en cuenta que había más plantilla de la que tuvo en cuenta en un primer momento, y eso le ha supuesto un lastre de 33 millones de euros que hay que ahorrar de donde sea.

El portavoz del sindicato de enfermería Satse en este centro, Raúl Ceresuela, ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que un «mal cálculo de plantilla» del ICS supondrá ahora afectar a la calidad asistencial y aumentar listas de espera en algunas intervenciones no urgentes. Y lamenta que en lugar de que se cierren menos camas en verano, se haya tenido que incrementar de nuevo la cifra, aunque afecte especialmente a camas quirúrgicas.

Los recortes llegarán a la Fiscalía

Y, desde luego, los grandes afectados serán los pacientes. Por este motivo, la asociación el Defensor del Paciente va a llevar estas medidas a la Fiscalía porque se está «poniendo en peligro a la ciudadanía». Así lo ha asegurado la presidenta de la entidad, Carmen Flores, que considera que es una gran «irresponsabilidad», una «vergüenza», además de una dejación de funciones por parte de las administraciones, que deben procurar por proteger a los ciudadanos.

Flores considera que es un «atentado contra la sanidad pública y contra la salud de los pacientes» este tipo de medidas que pueden tener unas consecuencias «graves», no solo para la salud de los catalanes, sino para las personas que visitan Cataluña durante el verano. Y además, de rebote, se incrementan las listas de espera y se resentirá el seguimiento de enfermos crónicos.

Como grave le parece a la presidenta de El Defensor del Paciente que no se vaya a renovar contratos, durante el verano, a profesionales que tengan un contrato temporal. Esto, asegura Flores, ya es «un problema enquistado», porque se les ofrece «contratos paupérrimos» que solo «consiguen que se vayan y que se busquen la vida en otro sitio». Luego, añade, tampoco se encuentran médicos cuando hace falta.

Flores considera que el Gobierno debe intervenir ante la situación de la sanidad en buena parte de las comunidades autónomas, y en el caso concreto de Cataluña, se pregunta dónde va a parar el dinero: «si hace falta, que lo saquen de otras cosas que no son prioritarias, que a veces diría yo que son caprichos», apunta Flores.

Y de la misma opinión es la diputada de Vox en el Parlament, María García Fuster, médico de profesión, que ha lamentado que «se invierte donde no se tiene que invertir. Hay dinero para pagar a 116 altos cargos del Departamento de Salud con sueldos por encima de los 100.000 euros de media, más dietas e incentivos, o los 270 millones para TV3, pero no hay dinero para atender a los catalanes».

Pero García Fuster considera que el Departamento de Salud de la Generalitat está derrumbado, y la sanidad publica se encuentra con un grave problema que «nuestra formación ya lo venía anunciando desde que entró el consejero Balcells, con sus políticas erróneas y que van a acabar dilapidando todo lo que es la sanidad pública».

Y desde el sindicato Metges de Cataluña reclaman que el departamento explique con «claridad y transparencia» la organización sanitaria de este verano ante el anuncio de algunas gerencias del Instituto Catalán de la Salud de que serán necesario aplicar esas restricciones de personal y asistencia. El secretario general del sindicato, Xavier Lleonard, no acaba de entender que falten recursos cuando, según la consejería de Salud, cuenta con un gasto autorizado para este 2024 superior al del año pasado. Por este motivo, no cree que se puedan justificar esos recortes «por motivos económicos».

Y el consejero de Salud, Manuel Balcells, intenta tranquilizar a los ciudadanos. Asegura que este verano no habrá «colapso» en los centros de atención primaria, ni tampoco «problemas asistenciales de urgencias y de emergencias». Y también asegura que «no hay reducción de presupuestos ni recortes. Hay un presupuesto superior, a pesar de que no sea tanto como nos gustaría». Y minimiza la reducción en verano, porque siempre se baja la actividad: «se cierran quirófanos, algunas unidades de corta estancia y algunas plantas». Pero, si efectivamente hay más dinero, más recursos para sanidad, la pregunta que se hacen los ciudadanos es obvia: ¿por qué se cerrarán más camas de hospital en los próximos meses?