Brian Raimundo, el acusado de intento de asesinato y violación a una adolescente en Igualada, durante el juicioEuropa Press

Cataluña

El violador de Igualada: un «delincuente sexual homicida» que quería hacer el máximo daño posible

Los médicos que atendieron a la joven asegura que las heridas que presentaba las ven «en la sala de autopsias».

No buscaba una satisfacción sexual, sino «hacer el máximo daño posible a la víctima». Así lo ha asegurado un agente de los Mossos, un analista de la conducta de la Unidad Central de Agresiones Sexuales de la policía autonómica, durante su declaración en la penúltima jornada del juicio que se celebra en la Audiencia de Barcelona contra Brian Raimundo Céspedes, acusado de violar brutalmente a una menor en Igualada.

El agente se ha encontrado situaciones de todo tipo, pero nunca antes había visto una agresión sexual de esas características, con lesiones «muy graves» en la zona del cráneo y anal. Este Mosso ha hecho un relato espeluznante de cómo se llevó a cabo esa agresión. Y también ha destacado la falta de «empatía y de arrepentimiento» del presunto agresor, como lo demuestra el hecho de que dejara a la víctima abandonada, en una calle oscura; y en el estado en el que lo hizo, herida de gravedad y semidesnuda, «sin ropa ni protección».

De hecho, ha relatado que «la víctima no era visible a ojos de nadie. Si no llega a ser encontrada por el camionero, no sé quién la hubiera visto. La dejó desnuda a la intemperie con lesiones muy graves. La dejó en un estado de absoluta fragilidad. Lo que quieren estas acciones es ampliar el sufrimiento de la víctima», ha destacado el analista de los Mossos.

De ahí que lo haya definido como un «delincuente sexual homicida». Además, se da la circunstancia de que el acusado tenía antecedentes por otros delitos sexuales. En concreto, por agredir a su hermana menor de edad, de siete años, y a dos exparejas: «la forma de resolver conflictos con mujeres es a través de la violencia», ha resumido.

Heridas que se ven en una sala de autopsias

Y si dura ha sido la declaración de este agente, no lo ha sido menos la de los médicos que atendieron a la menor. De hecho, han asegurado que las lesiones que presentaba la chica se ven más «en una sala de autopsias que en una consulta». Y tal era el calibre de las heridas que en un porcentaje elevado ocasionan la muerte inmediata o a las pocas horas, si es que no se recibe asistencia médica inmediata. Pro este motivo consideran que es «un milagro» que la chica continúe con vida.

Y, en este sentido, destacan que el hecho de que el camionero que la encontró la tapara de inmediato, también ayudó a que la chica sobreviviera, al menos hasta que la atendieran los equipos de Emergencias, puesto que hacía frío y la joven llegó al hospital con signos de hipotermia. Es más, aseguran que sin esta acción, la chica habría muerto con una probabilidad del «100%».

También han declarado dos psicólogas forenses que han explicado las secuelas que presentaba la chica, como síndromes de estrés postraumático, algunos de ellos «derivados de la afectación física», ya que tuvo muchas secuelas que le provocaron alteraciones del estado anímico.

"Tiene sintomatología ansiosa y depresiva que condiciona su día a día. Tiene pensamientos suicidas y demás, sueños y recuerdos que condicionan el día a día.

Su personalidad estaba en construcción, por lo que esto puede repercutir en su personalidad y causar secuelas«, ha explicado una de ellas. Y también ha dicho que la joven no recordaba los hechos »debido al estado de inconsciencia derivado del traumatismo craneoencefálico", y ha negado poder afirmar si va a poder recobrar parte del recuerdo.