El Ayuntamiento de Sant Cugat tiene empadronadas a casi medio millar de personas en la sede de los servicios sociales

El Ayuntamiento de Sant Cugat (Barcelona) tiene empadronadas en casa Mònica, la sede de los servicios sociales, a 493 personas. Así lo ha denunciado el grupo municipal de Vox, que asegura que aunque el consistorio no ha querido informar sobre sus nacionalidades, ni de las que están recibiendo ayudas sociales, «hay un gran número de extranjeros, todos ellos en situación irregular, sin domicilio fijo y viviendo en la calle o incluso en vehículos abandonados».

Desde la formación recuerdan que el empadronamiento es un trámite que les permite tener acceso a los servicios municipales, así como a ayudas sociales. En Vox aseguran que se trata de una fórmula «supuestamente amparada por la ley», también dejan claro que se trata de una práctica «que no certifica la vinculación con el municipio, un requisito que debería ser primordial para acceder a los servicios básicos como sanidad o educación que pueden acabar colapsados».

Además, desde el partido lamentan que no se está cumpliendo uno de los requisitos para darse de alta en el padrón, y es que un funcionario se desplace al lugar para comprobar «quienes son cuando no pueden acreditar con documentación la vinculación al municipio». Y más allá de esta cuestión, el portavoz del grupo municipal, Marcos Rodríguez, asegura que «algunos de ellos viven en la calle sin nada que hacer y generan inseguridad en los vecinos». Por este motivo, piden que se endurezcan los requisitos para «frenar el efecto llamada» de la inmigración ilegal que «causa inseguridad y problemas de convivencia».