Así serán las oficinas de banca móvil que se van a desplegar en CataluñaGeneralitat

Cataluña

El servicio de banca móvil en Cataluña empezará en septiembre

Cataluña ha perdido desde 2008 el 73 % de sus oficinas bancarias

Desde la crisis financiera de 2008, Cataluña ha perdido el 73 % de las oficinas y, actualmente, un 54% de los municipios no tiene ninguna. Por este motivo, la segunda quincena de septiembre se empezará a aplicar, de forma escalonada, el plan para desplegar oficinas bancarias y cajeros automáticos móviles en las 503 poblaciones que no disponen de este servicio que empezará en la provincia de Gerona, y se extenderá por toda Cataluña hasta diciembre.

La Banca Móvil de Cataluña, como así se llama, ofrecerá los mismos servicios y prestaciones que en una sucursal bancaria tradicional: se podrá retirar e ingresar dinero en efectivo; abrir cuentas, domiciliar y pagar recibos; consultar los movimientos y el saldo u obtener extractos. También los usuarios recibirán atención personalizada sobre créditos, préstamos hipotecarios, productos financieros, y tramitación de quejas y reclamaciones.

El Departamento de Economía ha creado una web en la que las personas interesadas podrán encontrar información sobre estos servicios que ofrece la banca móvil, qué entidad en concreto prestará ese servicio en su municipio (podrá ser Caixa Enginyers o Caixabank), qué días estará presente, a qué horas o cuánto tiempo permanecerá la oficina móvil. Cada entidad deberá garantizar el paso de la banca móvil un mínimo de un día al mes en cada municipio. Y, en el caso de las poblaciones de hasta 250 habitantes, deberán permanecer al menos 30 minutos; en el resto, no podrán estar menos de una hora.

El secretario general del departamento, Josep Maria Aguirre, dice que el objetivo es que el servicio no sea el de un cajero autonómico, sino que permitirá «revertir la pérdida de prestación personal a aquellos clientes que semanalmente se acercaban a las oficinas». En la misma línea, la consejera Natàlia Mas Guix, también ha precisado que el despliegue de las oficinas móviles se ha pensado de forma conjunta con el Departamento de Interior, aunque no ha dado más medidas sobre cómo se va a garantizar la seguridad de los usuarios que hagan uso de este servicio.

En catorce años, desde 2008, Cataluña ha perdido casi seis mil oficinas bancarias. En concreto, y según datos del Banco de España, ha pasado de tener 8.155 oficinas a 2.194 en 2022, y la tendencia sigue siendo esa, el cierre de estos espacios. Tendencia que también se ha hecho evidente en toda Europa, aunque en el caso catalán ha sido más intensa, teniendo en cuenta el proceso de fusiones y de absorciones que han afectado especialmente a las entidades financieras catalanas. De hecho, si en la Unión Europea, de media, han cerrado un 41%, en el conjunto de España ha sido un 58 %, y, en particular, en Cataluña, un 73 %.

Según el Govern, cuando todas estas oficinas móviles entren en funcionamiento, la totalidad de los catalanes tendrá garantizado el acceso a los servicios financieros que se pueden encontrar en una oficina bancaria.