El comisario jefe de los Mossos, Eduard Sallent, en la comparecenciaG. Altarriba

Sucesos

Los Mossos consideran que no hicieron «el ridículo» con la fuga de Puigdemont: «Hicieron un muro humano»

El comisario jefe de la policía autonómica considera que los agentes que ayudaron al fugado «no merecen vestir el uniforme»

El comisario jefe de los Mossos d’Esquadra, Eduard Sallent, ha comparecido este jueves para justificar la vergonzosa actuación del cuerpo policial este jueves, cuando el expresidente Carles Puigdemont se les escapó en las narices tras dar un discurso a la vista de miles de manifestantes en Barcelona. «Los hechos ocurrieron con gran rapidez», ha justificado Sallent.

El comisario ha asegurado que «si no hoy, en otra ocasión» se cumplirá la orden de detención a Puigdemont, y ha dado su versión de los hechos de «un día difícil que no acabó como esperábamos», pero en la que ha considerado que «los Mossos no hicimos el ridículo», aunque el dispositivo «no cumplió su objetivo».

Sallent ha negado que hubiera un trato previo con Puigdemont «ni con su entorno», y ha señalado que no pudieron detener al expresidente antes de su discurso porque desde el momento en el que lo vieron «entró acompañado de una masa de personas que ostentan cargos públicos y electorales».

Asimismo, ha señalado que cuando salió por detrás del escenario «los efectivos intentaron la aproximación hacia Carles Puigdemont, pero una masa de personas configuraron un muro y no nos permitieron poder acceder». Ha relatado que después, Puigdemont y Jordi Turull «se pusieron un gorro, subieron a un coche» y se marcharon, desapareciendo tras una persecución. Tras aquello, se activó el «dispositivo jaula» que paralizó Barcelona y Cataluña sin frutos.

Preguntado acerca de por qué no había agentes preparados detrás del escenario para proceder a la detención, Sallent ha confesado que «creíamos honestamente que habría una marcha hacia el Parlament», y que la posibilidad de que huyera «no estaba sobre el terreno como la más factible».

Además, ha señalado que no era «ni de lejos el lugar más idóneo para llevar a cabo una detención». Este punto, según ha confirmado Sallent, era la entrada al parque de la Ciutadella. Sallent reconoce ahora que Puigdemont les engañó con su juego del despiste: «En ningún caso él tenía el propósito de asistir al pleno de investidura».

«No descarta» que siga en Barcelona

Sallent también ha señalado que «no descarta» que Puigdemont siga en Barcelona, a pesar de las declaraciones de su abogado, Gonzalo Boye, y del secretario general de Junts, Jordi Turull. «No me creo nada de lo que digan estos señores, no puedo dar crédito a la persona que acompañó en la huida a Puigdemont», ha dicho, y ha confirmado que los Mossos seguirán buscándolo para detenerlo.

Además, ha considerado que los Mossos no saben cuándo llegó Puigdemont a Barcelona. «Si lo hubiésemos sabido, se habría actuado», ha dicho Sallent.

Jimmy Jump

Visiblemente exasperado, Sallent ha comparado a Puigdemont con un espontáneo que salta a un campo de fútbol: «Su venida ayer se parecía más a lo que hizo Jimmy Jump que a la dignidad que se le supone a un presidente de la Generalitat», ha ironizado. «Nosotros aún nos creemos un mínimo las instituciones», ha dicho.

Puigdemont en España antes de escapar de la Justicia por segunda vezEFE

Preguntado sobre la depuración de responsabilidades, Sallent ha dicho que «los Mossos no dimiten: a nosotros nos nombran y nos cesan; en mi caso el conseller de Interior». También ha considerado que los cargos públicos que dificultaron el trabajo de los Mossos d’Esquadra –en referencia a la cúpula de Junts y sus diputados, que ejercieron de barrera humana– también deberían responder de sus actos.

«No merecen el uniforme»

Sallent ha confirmado las dos detenciones de agentes de los Mossos por ayudar a Puigdemont en su fuga: «Es un acto reprobable e inaceptable». Sallent ha lamentado que estos detenidos «no merecen vestir nuestro uniforme», porque dificultar el trabajo de sus compañeros no es algo propio de policías, ha dicho.

Para Sallent, la colaboración de agentes en la huida de Puigdemont coloca al cuerpo «en una situación que no nos gusta nada». Ha defendido que las detenciones de los dos agentes son «acordes a derecho, legales».

Además, ha avanzado que los instructores del atestado están valorando las responsabilidades penales de otras personas para determinar si tienen alguna responsabilidad penal.