El Govern mantiene la propuesta de Diada del ejecutivo de ERC con un mensaje «de lucha contra la extrema derecha»

Una Diada de todos. Este es el mensaje que quiere transmitir el gobierno de Salvador Illa con los actos que se han preparado para celebrar el 11 de septiembre. Y también valores, ha asegurado la portavoz del Govern, Sílvia Paneque, como «la unidad, el respeto a la diversidad y la transversalidad». Y todo ello manteniendo la propuesta del ejecutivo de Pere Aragonès.

La única diferencia es que Illa pronunciará su discurso institucional con motivo de la Diada, el 10 de septiembre, desde el Palacio de la Generalitat, a diferencia de su predecesor, que lo hizo desde diferentes espacios, incluso desde una escuela pública.

El cartel de este año lo ha diseñado Sergi Delgado y consta de unas líneas geométricas que configuran un corazón con los colores de la Senyera. De hecho, el lema escogido es «muchos corazones, un solo latido». Y con relación a los actos, el 10 de septiembre por la tarde, el Parlament entregará la medalla de oro al Monasterio de Montserrat. También ese día, a las nueve de la noche, Salvador Illa pronunciará su discurso institucional.

El día 11 por la mañana, a primera hora, el Govern participará en la ofrenda floral al monumento a Rafael Casanova. Y, por la tarde, en el acto institucional que tendrá lugar en las columnas de Puig i Cadafalch, en Montjuïc.

Este acto lo dirigirá la actriz Marta Bayarri, que se ha marcado como objetivo «acercarlo a la gente más joven». De hecho, ha asegurado que será «transversal y transgeneracional». Habrá artistas musicales, ha asegurado, «muy relevantes», y testimonios de diferentes sectores de la sociedad como de la literatura, el deporte, la ciencia o elementos de la fiesta popular.

Contra los «mensajes excluyentes»

La portavoz del Govern también ha dejado claro que otro de los mensajes de fondo es la «lucha contra la extrema derecha». Asegura Paneque que, desde el momento en que se apuestan por valores como la diversidad o la transversalidad, «por sí solos, ya son mensajes en contra del fascismo y la extrema derecha», porque desde estos ámbitos, apunta, se lanzan mensajes «excluyentes» y que «están en contra de la diversidad».

También ha defendido que se haya mantenido la propuesta del anterior ejecutivo porque fue «sensible al momento político». Y Paneque confía en que el próximo 11 de septiembre todos los partidos tengan «altura de miras» y lancen «mensajes positivos más allá de la crítica fácil». Es más, considera que sería una «pobre decisión» si alguna formación «decide hacer crítica de esto».

Eso sí, Sílvia Paneque ha repetido en varias ocasiones que esta tiene que ser una Diada de todos, pero no ha querido señalar qué la hace diferente de las anteriores para que se pueda considerar así. Y ha insistido en el mensaje que impregna el diseño o los actos, de «unidad, riqueza y de diversidad» que acompañan a la idea de que «cualquier persona, piense lo que piense, venga de donde venga, hable la lengua que hable, se sienta vinculada».