Illa defiende el cupo pactado con ERC ante los presidentes del PP: «No aceptaré lecciones de solidaridad»

El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha salido a defender frente al resto de presidentes autonómicos la financiación singular para Cataluña que pactó con ERC a cambio de su apoyo en la investidura. En Santander, Illa ha asegurado que su modelo es «una financiación solidaria con el resto de España» y ha advertido: «No aceptaré lecciones de solidaridad de aquellos que practican la insolidaridad fiscal».

Según ha trascendido a través de fuentes cercanas al gobierno catalán, en el encuentro de presidentes Illa ha asegurado que el modelo de financiación actual «no responde a las necesidades reales de las autonomías», y ha apelado a la lealtad, al diálogo y a la cooperación entre instituciones y administraciones.

Frente a los presidentes autonómicos del PP, que han acudido al Palacio de la Magdalena para mostrar en bloque su oposición al cupo catalán, Illa ha insistido en que su propuesta está hecha «desde la solidaridad, la fraternidad, la implicación y el rigor».

​Ve «desconocimiento» en sus críticos

En la rueda de prensa posterior a la Conferencia de Presidentes, Illa ha acusado a los presidentes autonómicos críticos con la financiación singular para Cataluña de hablar «desde el desconocimiento» y de «faltar a la verdad», aunque no ha querido decir explícitamente si estos comentarios han sido solo de líderes del PP. «Quiero respetar la confidencialidad, pero no se sorprenderán ustedes», ha dicho ante la prensa.

«En el turno abierto, he hecho una matización muy breve respecto a algunos comentarios a los que no me referiré explícitamente, para decir que me sentía en la obligación de manifestar que estaban hechos desde el desconocimiento y que no se atendían a la realidad de lo que está pasando en Cataluña. Y no sé si en esta segunda parte de la afirmación he sido incluso demasiado generoso», ha señalado.

Illa también ha subrayado que no ha habido ningún presidente autonómico que haya puesto en duda la necesidad de reformar el modelo de financiación, un primer paso «relevante» ante el que ha pedido ponerse manos a la obra. El socialista ha pedido «no escandalizarse» y ha asegurado que el cupo catalán no busca «privilegios»: «No queremos ser más ni menos que nadie».

Vivienda e inmigración

En su intervención a puerta cerrada, el presidente catalán también ha abordado la cuestión de la vivienda –defendiendo su anuncio de construir 50.000 viviendas públicas de ahora hasta 2030 y de movilizar 4.400 millones de euros, un plan que considera «el más ambicioso de España»– y de la inmigración, actualmente en el punto de mira por las negociaciones entre el PSOE y Junts por el traspaso de las competencias a Cataluña.

Illa ha llamado a sus colegas a «poner nombre y apellidos» a la inmigración, en un llamado a «humanizarse». «Cataluña ha sido, es y quiere seguir siendo tierra de acogida», ha dicho, además de proponer que la próxima Conferencia de Presidentes se celebre en Barcelona. «No encontrarán al Govern de Cataluña en el choque y la confrontación», ha concluido.