La Generalitat sigue con sus bandazos en educación: rectifica para no perder horas de ciencias en Bachillerato

La consejería de Educación ha estado en el punto de mira y ha sido cuestionada menudo, en ellos últimos años, ya sea por su insistencia en aplicar la inmersión lingüística solo en catalán a toda costa, o por los malos resultados educativos han ido acumulando los últimos años los estudiantes catalanes. Y todo ello ha ido acompañado por los bandazos de los responsables del departamento.

Una de las últimas polémicas protagonizada por la consejería viene con relación a los cambios en el currículum de bachillerato, de acuerdo con la LOMLOE. Y, en esta ocasión, es la socialista Esther Niubó la que se ha visto obligada a rectificar. Primero, por las asignaturas de lengua y literatura castellana y catalana, que iban a dejar de ser obligatorias en segundo, para ser una materia optativa de primero. Ante el revuelo dio marcha atrás y aseguró que no se tocarían porque era una «línea roja».

Otra patata caliente está con las asignaturas de ciencias o matemáticas. En un primer momento, la consejería puso encima de la mesa que se agruparan las materias de física y química, y también biología y geología en el bachillerato, por lo que también se harían menos horas. Contra esta iniciativa se revolvieron docentes, sociedades científicas y las universidades públicas catalanas.

Pues bien, ha vuelto a haber otra rectificación tras reunirse la consejera con representantes de todos estos sectores. Ahora la idea es aumentar de tres a cuatro horas semanales las materias de modalidad en bachillerato, incluidas las obligatorias, lo que permitiría incrementar la docencia en ciencias, matemáticas y literaturas. Niubó ha defendido que el objetivo es que los alumnos «no pierdan horas» ni tampoco se resiente la calidad de la educación.

Pero la propuesta también incluye crear dos materias optativas complementarias anuales para compensar la pérdida de horas lectivas en las materias de modalidad que no se han podido cubrir a raíz de la fusión: Contextos de Biología, Geología y Ciencias Ambientales y Contextos de Física y Química. Ambas constarán de cuatro horas.

Las personas presentes en el encuentro destacaron que esta última propuesta mejoraba la inicial de la consejería, aunque advierten que se siguen perdiendo horas de ciencias. En cualquier caso, se dan dos meses para intentar consensuar una propuesta que convenza a todas las partes. Desde las sociedades científicas y también los representantes de docentes creen que hay otras opciones para mantener esas horas lectivas.

USTEC, contra el acuerdo con la OCDE

Desde luego la consejera de Educación tiene varios frentes abiertos. También con el sindicato de profesores USTEC, el mayoritario en la enseñanza catalana, que rechaza de plano el acuerdo firmado esta misma semana entre la Generalitat y la OCDE para mejorar el sistema educativo en Cataluña. Y es que, no hay que perder de vista, que los últimos informes que se han ido publicando, ya sea el PISA (que organiza la OCDE), como el PIRLS o el TIMMS sitúan a esta comunidad autónoma a la cola de Europa y de España en matemáticas, ciencias o comprensión lectora. Según el informe PISA, los alumnos catalanes han perdido un curso de matemáticas en la última década y casi dos en comprensión lectora.

Pero a USTEC no le interesa la «injerencia» que, a su parecer, supone el acuerdo firmado con la OCDE y consideran que son los profesionales y la comunidad educativa los que tienen que marcar el rumbo del sistema educativo porque son los que conocen «de primera mano» sus necesidades y particularidades. En ese sentido, han acusado al presidente de la Generalitat de reunirse antes con representantes de la OCDE que con los sindicatos educativos.

La portavoz de este sindicato, Iolanda Segura, dice que este organismo ha sido históricamente el eje impulsor de «políticas neoliberales materializadas en reformas educativas basadas en la competitividad, la estandarización y la mercantilización de la educación». Y, en este sentido, ha lamentado que el Govern quiera «externalizar» el asesoramiento en políticas educativas. De ahí que pida a Illa que rectifique y retire ese convenio firmado hace solo unos días con la OCDE.

Desde la Generalitat, en cualquier caso, se mantienen firmes. El presidente Salvador Illa dejaba claro que habrá diálogo con todos los sectores implicados, por supuesto con los profesores; que se irá despacio para consensuar propuestas, pero también advertía que, al final, se acabarían tomando decisiones.