Vista de la Catedral de Santiago de CompostelaJo Kassis / Pexels

Ciudad

El compromiso pendiente de Barcelona con Santiago de Compostela: «Todavía la esperamos»

La capital catalana tiene desde 2006 el deber moral de dedicar una calle a la gallega

Las ciudades de Barcelona y Santiago de Compostela están hermanadas desde el año 1970. Aquel pactó quedó refrendado en el año 2006, cuando los alcaldes de ambas urbes –respectivamente, Jordi Hereu y Xosé Sánchez Bugallo– inauguraron en la capital gallega la avenida Barcelona, en el barrio compostelano de Santa Marta.

En sus intervenciones, según recogen los medios que cubrieron el acto en aquel momento, ambos alcaldes señalaron los paralelismos entre ambas ciudades, tanto en su vocación europea y universalista como en la defensa de los respectivos cascos históricos. Estuvieron presentes representantes de las entidades gallegas en Barcelona y el alcalde Hereu firmó en el Libro de Oro del Ayuntamiento compostelano.

En aquel acto, Hereu aseguró que esperaba inaugurar «en breve» una calle de Santiago en la capital catalana, para hacer efectivo el hermanamiento a nivel simbólico. Hace 18 años de aquello, y a la calle de Santiago no está ni se la espera. Pese al interés que tiene el actual gobierno municipal por actualizar el callejero –«feminizándolo», retirando nombres de santos y añadiendo personajes históricos ligados a las izquierdas o el anarquismo–, devolver el favor a la ciudad gallega no está sobre la mesa.

Así lo denunciaba hace unos días el líder del grupo municipal del PP, Daniel Sirera, en un vídeo publicado en su cuenta de X. «Esa calle todavía no está puesta en la ciudad de Barcelona, y por tanto vamos a pedir al Ayuntamiento de Barcelona que cumpla con su compromiso», asegura el político popular. «Todavía la esperamos», insiste.

Otras calles gallegas

La ausencia de Santiago en el nomenclátor barcelonés resulta, además, doblemente extraña, ya que en la capital catalana sí existen tanto la calle de Galicia –en el distrito de Sant Andreu– como una «calle de los Gallegos». También se encuentran en el callejero cuatro vías dedicadas a las cuatro capitales de provincia gallegas: A Coruña, Lugo, Ourense y Pontevedra.

No obstante, faltan también las otras dos ciudades gallegas: ni Ferrol ni Vigo tienen calle dedicada en Barcelona. Sí que hay, sin embargo, una calle y una plaza dedicadas al apóstol Santiago: la calle de Sant Jaume Apóstol, en Vallvidrera, y la célebre plaza Sant Jaume, que alberga tanto el Palacio de la Generalitat como el Ayuntamiento.