El momento de la investidura de Bonet como doctor honoris causaUAO CEU

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La UAO CEU inviste a José Luis Bonet y Miquel Roca como doctores honoris causa en su 50º aniversario

Roca llama a mantener vivo el espíritu de consenso entre diferentes de la Constitución, y Bonet lamenta el «cortocircuito» del ‘procés’ en Cataluña

La Universidad Abat Oliba CEU de Barcelona (UAO) ha celebrado este miércoles el acto de investidura como doctores honoris causa del presidente de la Cámara de Comercio y presidente de honor de Freixenet, José Luis Bonet Ferrer, y del socio fundador y presidente de honor del despacho Roca Junyent, Miquel Roca Junyent, uno de los siete «padres de la Constitución».

El rector de la UAO, Rafael Rodríguez-Ponga, ha destacado que se trata de dos figuras de la vida catalana «reconocidas en España y alrededor del mundo». La incorporación al claustro de doctores del empresario y el jurista tiene lugar en el marco de las celebraciones por el 50º aniversario de la universidad, que cumple medio siglo de presencia en la ciudad de Barcelona.

Por su parte, el gran canciller de la UAO y presidente de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP), Alfonso Bullón de Mendoza, ha destacado el «papel decisivo de Roca» como «garante de nuestros derechos y libertades fundamentales» y la contribución de Bonet, que al frente de la Cámara de Comercio defiende «los intereses de nuestras empresas en el ámbito internacional».

«El derecho nos obliga»

«El derecho nos obliga, y por eso lo hemos de hacer comprensible: lo hemos de entender para vivirlo», ha dicho Roca en su discurso de aceptación, en el que ha loado el derecho como «regulador y motor del cambio social». Así, el nuevo doctor ha llamado a expandir el conocimiento del derecho a la educación básica, y sacarlo «de la academia», ya que «sólo conociendo los propios derechos uno entiende por qué ha de respetar los de los demás».

En tono irónico, Roca ha reconocido que el doctorado «es a la Constitución de 1978». «Con esta Constitución nos reconocemos fieles servidores del Derecho en mayúscula», ha dicho, recordando el momento de la redacción de la Carta Magna como un proceso de «romper una tradición de intransigencia» para poner las bases de una sociedad donde convivir, especialmente entre quienes piensan diferente.

«Consenso quería decir, quiere decir y querrá decir siempre hacer posible la diferencia», ha dicho. «La integración de la diversidad es el gran reto de nuestro momento histórico», ha concluido, agradeciendo un honor recibido que recibe como un suave yugo: «Este doctorado honoris causa tiene para mí mucho de amable y noble servitud».

«Cortocircuito» en Cataluña

Por su parte, Bonet ha agradecido en su discurso a sus maestros y sus compañeros de camino, y ha centrado su intervención –que ha adoptado la forma de una lección magistral de teoría económica– en la importancia del impacto de las instituciones como ferias o cámaras de comercio en el desarrollo económico de los países.

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Se ha referido a las «deficiencias de la infraestructura institucional de España» como un factor en la baja productividad de la economía nacional. En clave catalana, Bonet ha lamentado los «más de diez años de extravío que ha impuesto y aún impone el procés independentista», y ha apuntado a la existencia de un «cortocircuito pernicioso que ha hecho perder a Cataluña el liderazgo que siempre ha tenido». Con todo, el nuevo doctor honoris causa considera que «la potencia de Cataluña sigue existiendo».

Una doble ‘laudatio’

Antes, el catedrático de Derecho Penal de la UAO, Carlos Pérez del Valle, realizó la laudatio de Roca Junyent, recorriendo su vida laboral como abogado y su carrera política, poniendo en valor su papel en la redacción de la Constitución en 1978, en la que representaba a las minorías catalana y vasca.

Pérez del Valle destacó el rol del nuevo doctor honoris causa en los foros a los que ha sido invitado, destacando su mensaje institucional, de vigencia de la Carta Magna, y el personal, que alude a la relación entre quienes la redactaron, tan diferentes ideológicamente. «Me emocionan unas palabras que él siempre repite acerca de su dificultad inicial para acercarse a Fraga: ‘Fuimos amigos y lloré su muerte’».

Por su parte, el catedrático de Economía Aplicada de la UAO CEU, Juan Corona, hizo lo propio con Bonet, a quien describió como «amigo» y con quien comparte una larga trayectoria personal y profesional. «Bonet dice de sí mismo que es mitad monje y mitad soldado», destacó Corona, poniendo en valor el equilibrio entre la faceta profesional y la docente del co-protagonista de la velada.

Corona ha destacado su labor al frente de la Cámara, donde dice que hace «política de la buena» defendiendo la actividad de los empresarios. Con todo, ha dicho, «lo que más destaca de José Luis Bonet es su categoría humana, su talla de universitario y empresario». Y ha recordado la «ley de las tres T: trabajo, talento y tenacidad», a la que en los últimos años Bonet ha añadido una cuarta: «La transformación, a la que todos estamos obligados ante las crisis de nuestros tiempos».