Un edificio okupado en el barrio de Vallcarca de BarcelonaEuropa Press

Cataluña

Las juventudes de la CUP organizan un taller sobre cómo pinchar la luz para iluminar el árbol de Navidad

También han editado un libro con instrucciones para ocupar de forma ilegal una vivienda

Arran, las juventudes de la CUP, ha organizado un taller para pinchar la luz. El taller en cuestión tendrá lugar el próximo 20 de diciembre en un Ateneo Popular «autogestionado», que se encuentra en el distrito de Horta de Barcelona, que no es otra cosa que un edificio okupado: en el mensaje en el que se anuncia la actividad en cuestión, se explica que «haremos un taller para que podáis iluminar vuestros árboles de Navidad de forma gratuita Después daremos la bienvenida a las fiestas con una noche de PD's. ¡Tendremos pinchos y bebidas a precios populares!».

Para el presidente del grupo municipal del PP, Daniel Sirera, en Barcelona «estamos acostumbrados a este tipo de actos delictivos organizados por Arran sin que el Ayuntamiento actúe». Considera «intolerable» que los cachorros de la CUP se dediquen a organizar ese tipo de talleres, que van desde cómo pinchar la luz hasta destrozar autobuses turísticos, «normalizando una violencia que no debe tener cabida en nuestra ciudad».

Por este motivo, pide al alcalde, Jaume Collboni, que acabe con «estas prácticas mafiosas» de Arran y que no permita este tipo de actividades «delictivas» que «incitan reiteradamente a la violencia». Y todo ello, apunta Sirera, después de años de «impunidad».

En la misma línea se ha pronunciado el líder de Vox en Barcelona, Gonzalo de Oro, quien cree que el Ayuntamiento debería perseguir este tipo de actos, como que se «fomenten cursos para ser okupa, haciendo talleres para pinchar la luz en edificios okupados». En cualquier caso, recuerda que no es la primera vez que se hace algo parecida. En Can Vies se han organizado actividades de similares características.

Y más allá de esta cuestión, de Oro considera que «consentir las ocupaciones ilegales es una burla para todos los ciudadanos que pagan impuestos, alquiler o hipotecas, estos jetas y vagos no deben tener privilegios, más cuando la vivienda en Barcelona es un bien escaso». El concejal de Vox también considera que las administraciones deberían tener una actitud de firmeza para acabar «con la permisividad» de los cachorros de la CUP acostumbrados a llevar a cabo acciones de turismofobia, atacar carpas de la formación, o más recientemente atacó un supermercado de Mercadona.

Manual okupa

No es ningún secreto que desde Arran se fomenta la ocupación ilegal. Este taller más práctico sería un ejemplo, pero también han publicado un «libro para la okupación», que es la «recomendación que hacen» para hacer frente a una situación en la «que ni destinando todo nuestro sueldo podríamos permitirnos vivir solos, solo es síntoma de una sociedad cada vez más precarizada. Nuestra recomendación para hacerle frente y poder elegir cómo queremos vivir en un sistema que no nos garantiza ni vida ni salud».

En el manual facilitado por los antisistema se dice, entre otras cosas, que hay que «tantear el terreno» y tener claro qué se busca para «con las necesidades claras, iniciar la fase de investigación». Eso es, la búsqueda del piso. Y para ello se recomienda elaborar una lista de pisos vacíos; hacer visitas en diferentes momentos del día para saber si hay alguien en el interior; e incluso informarse sobre la propiedad, si es un pequeño o gran tenedor, porque la rapidez en el desahucio puede depender de eso.

Y una vez decidido el inmueble a ocupar, muestran algunos consejos para llevar a cabo la entrada. Se asegura que los puntos más fáciles para acceder son las ventanas o la puerta, y a veces se puede optar por el tejado; también se apunta a que se pueden romper vidrios o la cerradura, y sobre todo evitar ser grabados para que no les puedan identificar. También hay esquemas con instrucciones para forzar la cerradura de una puerta o para «pinchar» el suministro eléctrico.

Y en una segunda fase, y tras pasar la «tormenta», como así lo llaman, que son las primeras horas tras una ocupación, se dan consejos sobre cómo llevar a cabo «la defensa del espacio y las visitas policiales». O qué hacer ante un desalojo; una visita de agentes de policía e incluso en el juicio. Y advierten de las penas que puedan acarrear los delitos que se cometen durante una ocupación: como por ejemplo defraudación del fluido eléctrico, usurpación o desobediencia, entre otros. El libreto incluye hasta entrevistas con personas que son okupas y explican su experiencia.