El Síndic de Greuges intenta impedir un año más que los Santa Claus moteros circulen por Barcelona

Por tercer año consecutivo, el Síndic de Greuges de Barcelona, David Bondia, tratará de impedir la Papanoelada Motera que prevé reunir en el centro de la ciudad a cientos de Santa Claus sobre dos ruedas este domingo, 15 de diciembre. La convocatoria ya se ha difundido a través de Telegram, en un mensaje en el que dejan claro que formalmente no hay ningún responsable de la quedada, para evitar que haya a quien dirigir las posibles multas.

«Somos fans de las multas merecidas. Cualquier acto incívico puede ser sancionado por las autoridades. Y nos alegramos de ellos», reza el mensaje difundido para anunciar un evento que en ediciones anteriores solía ir acompañado de una recogida solidaria de juguetes. Si nada lo impide, el acto empezará a las 17h en la calle dels Tarongers, en Montjuïc, de donde saldrán media hora después para una ruta por el centro de Barcelona.

En el punto de mira

La iniciativa, que en los últimos dos años ha reunido a unos 1.500 participantes, está en el punto de mira tanto de los Comunes como de la Sindicatura de Greuges de Barcelona, que ya ha pedido al Ayuntamiento que impida la Papanoelada. Según destacan en un comunicado, se quejan por el impacto medioambiental y las afectaciones a la salud de las personas, el problema de movilidad y el riesgo de seguridad, ya que «las imprudencias en la conducción son una tónica habitual en estas concentraciones».

Así, el síndic señala hace referencia a la carta pública de varios colectivos de profesionales de la salud que alertaba de la necesidad de actuar urgentemente para mejorar la calidad del aire, y advierte del nivel de ruido que suele generar esta concentración motera, así como la congestión en las calles ya de por sí saturadas en la semana previa a la Navidad.

Además de esta queja formal, también ha trascendido que seis entidades –que incluyen a la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona o el Bicicleta Club Catalunya– tratarán de impedir el paso de las motos en Gran Vía, a la altura de Comte d’Urgell. La concentración se anuncia «por una Gran Vía y unas fiestas sin humos, para evitar enfermedades respiratorias y para parar la Papanoelada Motera».