La Comunidad Valenciana cierra dos meses marcados por importantes inversiones internacionales

Conseguir proyectos internaciones es, en muchas ocasiones, sinónimo de relanzar un territorio, ponerlo en el mapa o permitirle diferenciarse de sus principales competidores en diferentes espacios y sectores. En este sentido, la Comunidad Valenciana ha vivido dos meses –junio y julio– en los que ha sido noticia, entre otros aspectos, por haber logrado amarrar cuatro de esas grandes inversiones que prometen dar un impulso a su imagen y situación económica.

De norte a sur, en el municipio castellonense de Onda, este julio se ha celebrado la inauguración oficial del centro logístico de Amazon, unas instalaciones de 130.000 metros cuadrados destinadas al almacenaje y gestión de cuatro millones de paquetes y que supondrán la creación de mil puestos de trabajo directos.

Según ha declarado a El Debate la alcaldesa de Onda, Carmina Ballester (PP), «supondrá un revulsivo no solo para el municipio, sino también para la provincia y la Comunidad Valenciana». Según la primera edil, que el gigante del comercio electrónico a nivel mundial se haya decidido por Onda frente a «otras ciudades muy importantes del arco mediterráneo» ha sido posible gracias a cuatro factores.

El primero que destaca es el «intenso trabajo que se ha realizado por parte del Ayuntamiento con sus técnicos desde septiembre de 2019». Sin él, asegura Ballester, «no se habría podido sacar adelante ni tampoco haber sorteado las dificultades añadidas, como una pandemia mundial».

A su vez, la alcaldesa señala la «situación estratégica» de la localidad a la hora de la decisión de Amazon de instalarse allí, ya que la «red de carreteras es muy buena y los accesos a las autovías son muy rápidos», lo que les permite «mejorar su logística de reparto».

En tercer lugar, Ballester pone de relieve que «la política de exenciones y bonificaciones» llevada a cabo por el Consistorio ha sido «determinante»: «Si miramos más allá del cortoplacismo, esas medidas suponen más inversión y recursos, que se pueden destinar a mejorar la vida de los ciudadanos».

Por último, la alcaldesa califica de «fundamental» el hecho de contar en el Ayuntamiento «con mayoría absoluta», puesto que eso aporta «seguridad jurídica e institucional»: «Esa estabilidad política nos permite no estar presos de las veleidades de partidos minoritarios y de todas aquellas formaciones a las que no les gustan este tipo de inversiones», asegura Ballester.

Al acto de inauguración acudieron, además de la propia alcaldesa, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig y el director de Amazon Customer Fullfillment en Italia, Francia y España, Fred Pattje.

Ford sigue y Volkswagen se implanta

En el terreno de la automoción, han sido dos las buenas noticias que ha celebrado la Comunidad Valenciana. Siguiendo de norte a sur, en el municipio valenciano de Sagunto, la alemana Volkswagen anunció la construcción y puesta en marcha de su gigafactoría, donde se fabricarán las baterías de los vehículos eléctricos de la marca.

Con una inversión de tres mil millones de euros, Volkswagen estima que se pueden llegar a crear tres mil puestos de trabajo directos una vez la planta comience a operar, previsiblemente en 2026, y se complementará con otra apuesta millonaria de cara a construir otra planta en Pamplona.

La presentación del proyecto estuvo enmarcada en un ambiente de gran expectación y satisfacción. Prueba de ello es que al acto acudió el propio presidente de Volkswagen, Herbert Diess. Allí, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, destacó el papel de los fondos europeos Next Generation a la hora de hacer posible esta iniciativa y aseguró que, de ese modo, España aspira a convertirse «en el gran hub de la fabricación de baterías» a nivel europeo.

Por otra parte, si Volkswagen inicia su andadura empresarial en la Comunidad Valencia, Ford ha tomado la decisión de seguir apostando por la conocida planta de Almussafes, situada a escasos kilómetros de la ciudad de Valencia. Y es que la dirección de la empresa americana ha comunicado que allí se fabricarán los nuevos modelos de vehículos eléctricos de la compañía.

La planta valenciana, cuyos seis mil trabajadores llevan desde antes de la pandemia con tensiones y sufriendo ajustes de plantilla y de turnos, se ha impuesto a la de la localidad alemana de Saarlouis, lo que supone un espaldarazo a la hora de asegurar su continuidad «para más de una década», según informó la sección de UGT Ford minutos después de conocer la decisión.

En cuanto a los modelos a producir en la factoría de Almussafes, estos se empezarán a fabricar en 2025, aunque aún no están aprobados, con lo que sus nombres se darán a conocer más adelante. Sin embargo, lo que sí está claro para el director de Fabricación de Ford España, Dionisio Campos, es que la puesta en marcha de estos nuevos modelos eléctricos supone «un hito fundamental para la planta y para la transformación del negocio de Ford Europa hacia un futuro completamente eléctrico y conectado».

Ante esta decisión y el contexto económico actual, el reto es mayúsculo, pues la factoría se ha visto obligada a parar su actividad durante diez días entre agosto y octubre debido a la falta de suministro de componentes para la fabricación de vehículos.

Alicante, de cine

Por otra parte, ya en el sur de la Comunidad Valenciana, Puig anunció a mediados de julio que los estudios cinematográficos de la Ciudad de la Luz, en Alicante, albergarán doscientas producciones en los próximos cinco años, una vez se acaba de producir la reapertura de las instalaciones.

A pesar de que no pudo desvelar «por confidencialidad» más detalles, el presidente de la Generalitat sí adelantó que los tres primeros rodajes serán en octubre y noviembre de 2022, así como en enero de 2023. En cuanto a las firmas que los llevarán a cabo, Puig «solo» pudo señalar que dos son «grandes productoras estadounidenses» y la tercera, española, pero «de carácter internacional».

En cuanto al impacto económico, Puig aseguró que se estima la creación de cinco mil puestos de trabajo en todo el tiempo que duren las filmaciones y se producirán 1,4 millones de pernoctaciones, no solo en la ciudad de Alicante, sino en todo su entorno.

Asimismo, en datos globales el jefe del Consell calculó que los doscientos rodajes hasta 2027 supondrán una cifra de negocio alrededor de los 800 millones de euros, con lo que apostó por la viabilidad de los estudios de la Ciudad de La Luz: «Existen demanda, posibilidades y negoció», apuntó Puig.

Con todo ello, está por ver si las inversiones internacionales en la Comunidad Valencia son hechos aislados o se convierten en dinámica.