La lluvia sale al rescate de los incendios de Alicante y Castellón y sofoca las llamas

La lucha contra los fuegos de Vall d’Ebo y Bejís avanza muy favorablemente gracias a las precipitaciones y la humedad

Bendita lluvia. Esa habrá sido la frase más repetida entre los equipos de extinción y vecinos de los municipios afectados por los incendios que aún siguen asolando la Comunidad Valencia, especialmente los que se originaron en la localidad alicantina de Vall d’Ebo y en Bejís (Castellón).

Respecto al primero, un portavoz del Consorcio de Bomberos de Alicante explica a El Debate que la evolución a lo largo de la noche ha sido «favorable porque las condiciones climatológicas han ayudado».

Aunque reconoce que en perímetros como el que abarca el fuego en Vall d’Ebo, que es de ochenta kilómetros, «no suele llover en todas las partes», en este caso la lluvia «se ha ido moviendo y ha afectado a todas las zonas del incendio».

Según explica el portavoz, este hecho ha causado «dos efectos». Uno de ellos es que provoca «un descenso de las temperaturas y favorece las condiciones de humedad». El segundo es que, como consecuencia del anterior, «refresca el terreno».

Sobre este último aspecto, el portavoz del Consorcio de Bomberos de Alicante hace hincapié en lo «muy importante» que es la temperatura ambiental: «Aunque no se vea la llama, el fuego continua por debajo de la tierra y puede volver a salir a la superficie en condiciones de extremo calor», asegura.

En referencia a la superficie arrasada, el portavoz indica que son 11.700 las hectáreas que las llamas se han llevado por delante en un perímetro de ochenta kilómetros. Ambos parámetros «no crecerán más o lo harán muy poco», afirma.

Asimismo, los efectivos en la zona harán vuelos de reconocimiento para trasladar al Puesto de Mando Avanzado (PMA) las condiciones en que está el terreno y, de ese modo, adoptar las medidas oportunas.

Este gran avance a la hora de extinguir el incendio en Vall d’Ebo ha permitido que los vecinos que fueron evacuados de sus domicilios días atrás puedan volver a sus casas, una vez ya se encuentran fuera de peligro.

Evitar reproducciones

En cuanto al fuego que se originó en Bejís, el portavoz del Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón, Manolo Nicolás, confirma a El Debate que durante la última noche «ha llovido bastante». Según la Agencia Estatal de Meteorología, la cantidad caída en la zona del incendio ha sido de quince litros por metro cuadrado: «No es nada extraordinario, pero sí ha dado para frenar el avance descontrolado de las llamas», afirma Nicolás.

Al igual que en el incendio de Vall d’Ebo, en Bejís «se va a seguir trabajando todo el día con todos los medios -35 aéreos- porque es posible que haya reproducciones», indica Nicolás, que advierte de que el fuego «todavía está activo y ni siquiera estabilizado».

Preguntado por las hectáreas afectadas, el portavoz de los Bomberos de Castellón señala que siguen siendo las «diez mil que había en la noche del miércoles».