Ribó se escuda en el cambio climático ante la polémica por la caída de una rama centenaria en Valencia

La caída de una rama de unos de los ficus más grandes y longevos de la ciudad de Valencia, que causó cuatro heridos leves, sigue generando polémica.

Desde el momento en que sucedieron los hechos, el equipo de Gobierno se ha escudado en el cambio climático y en circunstancias externas a la hora de explicar el incidente. Por una parte, el vicealcalde valenciano y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, apuntó a las intensas y sucesivas olas de calor como causa de que la rama quebrara. Versión que se sigue manteniendo desde su departamento.

Asimismo, el concejal de Compromís también apuntó a factores exógenos: «Hay muchas ocasiones en las que no es posible saber cuándo una rama va a colapsar, porque al final son seres vivos igual que las personas». Según la teoría de Campillo, no podemos «detectar cuál es el grado de enfermedad».

Sin embargo, lo particular de este incidente, más allá del tamaño del árbol y su antigüedad (data del año 1852), es que se produce en la misma plaza en la que el Ayuntamiento está llevando a cabo unas importantes obras para desmontar una estación de servicio, con lo que no son pocas las voces desde la oposición en el Ayuntamiento que apuntan a que esta circunstancia haya podido provocar la ruptura y caída de la rama.

Una de ellas es la del concejal del Partido Popular en el Consistorio, Carlos Mundina, que no se cree que el incidente en el centro de Valencia sea casual ni por las razones que apunta el equipo de Joan Ribó: «No es un hecho aislado y se repite en muchas partes de la ciudad», ha asegurado el edil.

Además, ha apuntado directamente a la gestión de Compromís y PSPV-PSOE en el Ayuntamiento valenciano al afirmar que la caída de la rama del ficus «es consecuencia del abandono de las zonas arboladas de la ciudad», a la par que señala que el PP ha denunciado «reiteradas veces la falta de mantenimiento de las zonas ajardinadas».

Informe técnico

Respecto a la influencia de las obras en la zona del incidente, Mundina lo califica como «agravante» y destaca que cuando su partido salió de la gestión del Consistorio en 2015 y dio paso a Compromís y los socialistas dejó «el convenio preparado para desmantelar» la gasolinera y acusa al Ejecutivo de no haber hecho «nada» en estos más de siete años que llevan en el poder.

En este sentido, el concejal popular indica que llevan desde hace dos años «exigiendo que se llevara a cabo un proyecto de urbanización de los terrenos de la antigua gasolinera con la idea de ampliar el jardín y retranquear el muro». Con ello, continua Mundina, se habría conseguido dar «más espacio para que pudieran crecer las raíces del ficus centenario y no hubiéramos llegado a este punto, donde podríamos estar hablando de una auténtica desgracia».

Por su parte, para el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento, Fernando Giner, la caída de la pesada rama demuestra que Valencia «necesita un plan director de arbolado y otro de riesgos», que se echa «tristemente» en falta.

En referencia a las explicaciones dadas por Campillo, Giner señala una que el concejal de Compromís obvió: «Cuando se aprobó el desmantelamiento de la gasolinera, los técnicos del servicio de Jardinería ya advirtieron del peligro que suponía desmantelarla sin dar seguridad a las raíces del árbol».

Giner también apunta a que en ese mismo informe se recomendaba «mantener los depósitos de la estación y rellenarlos de arena». Al parecer, esto se estaba comenzando a hacer, «a pesar de que el desmantelamiento comenzó en febrero».

En cuanto a petición de explicaciones, el concejal de Ciudadanos señala que se debe saber «qué ha pasado» y por qué el ficus, tal como ha reconocido el propio Ayuntamiento, «hacía un año que no se revisaba para conocer su estado». Así, Giner ha reclamado «la información de los técnicos, no la opinión personal de Campillo, tal como nos tiene acostumbrados».

En esta línea, Mundina ha anunciado que el PP ya ha solicitado tanto al Ayuntamiento como a la Generalitat Valenciana «los informes de trabajo de protección y conservación del ficus caído», así como que ya ha registrado la petición para que se les entreguen «los estudios radiculares, de tracción y de georradar».

El popular ha destacado que en el último informe de quejas vecinales se observa que las referentes a falta de poda y mantenimiento del arbolado han aumentado un 91 % y las de deficiencias en parques y jardines, un 45 %.

Por último, Mundina ha señalado que el Ayuntamiento de Compromís y PSPV-PSOE «se ha visto obligado a pagar 50.000 euros de responsabilidad patrimonial por caídas de ramas o árboles encima de vehículos estacionados en las calles de la ciudad».