Quién es Carles Mulet, el senador de Compromís al que le sangran «los ojos» al ver el nombre de los pueblos en español

En enero de 2010 nació la coalición Compromís. Hasta ese momento, los partidos políticos que la integran (Bloc Nacionalista Valencià, Iniciativa del Poble Valencià y Verds Equo del País Valencià) se limitaban a obtener unos resultados más bien discretos en cada proceso electoral al que se presentaban.

Fue entonces cuando emergió la figura de una combativa Mónica Oltra, que pronto se convirtió en el azote parlamentario del Partido Popular de Francisco Camps denunciando a bombo y platillo los casos de corrupción y despilfarro de su Gobierno. Sus camisetas en la tribuna de las Cortes le consiguieron aupar hasta la vicepresidencia del Gobierno valenciano y, paradójicamente, fueron las que le obligaron a dar un paso atrás por, presuntamente, encubrir los abusos sexuales de su marido a una menor de catorce años en un centro bajo su responsabilidad.

Sin embargo, su estrategia de agitación y propaganda creó escuela y uno de los alumnos aventajados es el senador de Compromís por la provincia de Castellón, Carles Mulet.

Desconocido por sus aportaciones en la Cámara Alta o de sus iniciativas parlamentarias, Mulet se ha granjeado su fama a base de ir enlazando polémicas en las que no ha pasado ni ha querido pasar desapercibido.

La última ha tenido como protagonista el uso de la lengua española. El nacionalista ha hecho público su cabreo a raíz de que el Boletín Oficial del Estado (BOE) haya publicado el nombre de varios municipios y comarcas de la Comunidad Valenciana, Cataluña y Aragón en castellano y no en valenciano –aunque para Compromís sería catalán–.

Así, el senador ha afirmado que ha contemplado «con los ojos sangrando» cómo la publicación oficial ha escrito localizaciones como Bajo Ampurdán, Ribera de Ebro, Alto Maestrazgo o Alcoy. Ante ello, Mulet se ha preguntado «qué titulación académica tiene quien ha escrito este texto», «cómo accedió al cargo» o «qué medidas van a adaptarse para que esto no vuelva a ocurrir». Mulet, que ha puesto «adaptarse» y no «adoptarse», reprocha que el autor del texto en el BOE escribe «como le sale de las narices».

Preocupado por una «apocalipsis zombi»

Otra de las polémicas protagonizadas por el senador nacionalista fue cuando, estando Mariano Rajoy en la Moncloa, utilizó una pregunta parlamentaria para que el presidente del Gobierno le informase acerca de «los protocolos ante la posibilidad de un apocalipsis zombi».

Uno de los momentos más tensos de Mulet en el Senado fue cuando, en respuesta a que Susana Díaz llamara a Compromís «izquierda inútil», subió a la tribuna, llamó «asco de señora» a la expresidenta de la Junta de Andalucía y llegó a romper una foto suya. Todo ello, eso sí, con el posterior apoyo incondicional de su compañera de filas, lideresa y mentora, Mónica Oltra.

Pero si Mulet tiene a alguien entre ceja y ceja es al Rey Don Juan Carlos I. El independentista volvió a utilizar el Senado para una de sus habituales polémicas y pidió que la actriz y presentadora Bárbara Rey compareciera en la Comisión de Interior para aclarar «las informaciones que apuntan a que recibió dinero público de fondos reservados para que no hiciese públicas sus supuestas relaciones con supuestos cargos del Estado». Aunque la Mesa de la Cámara Alta denegó la petición con la mayoría absoluta de PSOE y PP, la pregunta logró su objetivo mediático y Mulet incluso participó en directo en el programa de Telecinco Sálvame.

Asimismo, el dirigente de Compromís también preguntó por escrito al Gobierno acerca de los «supuestos privilegios, negocios y pagos a la enésima amiga del Rey emérito» que salieron a la luz desde que trascendió su relación con Juan Carlos de Borbón.