Elecciones 28M  Feijóo ve a Sánchez «en tiempo de descuento» y pide el cese de Marlaska por su «cacicada»

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha vuelto a pedir la destitución del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, tras el varapalo del Tribunal Supremo en relación al cese del coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos.

Lo ha hecho desde la localidad alicantina de Elche, donde ha recordado que el magistrado ha sido reprobado por el Congreso de los Diputados, requerido por la Eurocámara y un sinfín más de escándalos. En esta línea, le ha acusado de dejar que sea el proetarra Arnaldo Otegi quien «manda en la política penitenciaria» del Gobierno.

A este respecto, cabe destacar que Marlaska consumó hace unos días los últimos acercamientos de presos de la banda terrorista ETA a prisiones del País Vasco y Navarra, en consonancia con los llamados ‘viernes basura’ que viene desarrollando el Ejecutivo de Sánchez desde que llegó al palacio de la Moncloa.

En opinión del líder de la oposición, lo cometido por el titular de Interior supone algo «ilegal», toda una «cacicada» por no querer «asumir las órdenes de una jueza de instrucción» que había designado al oficial de la Benemérita y a su equipo como Policía Judicial. Es decir, no podía reportar las novedades al ministro por mucho que este, tal como detalla la sentencia, intentase hacer una «interferencia».

«Si es inteligente, que dimita»

Al seguir todavía en su puesto, Feijóo se ha preguntado «qué más debe hacer Marlaska» para abandonar el Ministerio. Él mismo ha contestado, diciendo que puede dimitir o ser cesado, aunque le ha dado un consejo: «Si es inteligente, que presente su dimisión».

El presidente de los populares también ha hecho hincapié en la división interna del Gobierno. Lo ha hecho aludiendo a la aplicación de la ley del ‘solo sí es sí’. Así, no se termina de explicar cómo es posible que el mismo Ejecutivo que tardó «unos días» para reformar el Código Penal en favor de los independentistas catalanes sea el mismo que mantiene la «chapuza» del fetiche de Irene Montero.

Su indignación va a más cuando recuerda que son «más de 800» los beneficiados por la norma y que su modificación en el Congreso sigue eternizándose «a pesar de contar con los votos del Partido Popular» para revertirla cuanto antes.

Todo lo anterior lo que evidencia según el senador no es sino que el Pedro Sánchez y su Consejo de Ministros están «en tiempo de descuento», aunque han de «disimular» porque las elecciones están a menos de dos meses.

Otro ejemplo de la implosión gubernamental Feijóo lo ha puesto con las ruedas de prensa tras la reunión de los martes en el palacio de la Moncloa. Según el líder del PP, a Belarra «no le dejaron»presentar su particular Ley de Familias, algo que también sucedió una semana antes cuando a Irene Montero se le prohibió expresamente sentarse ante los periodistas. La consigna era clara: tú no vienes.

Si a ese ya de por sí complejo cóctel se le une la presentación este domingo que Yolanda Díaz va a hacer de Sumar, su propia plataforma-partido, no hace falta ningún ingrediente más a la salsa política de la izquierda.

Después de decir que «parte del Gobierno se está pensando ir», Feijóo no ha podido ser más gráfico: «Para entender a la izquierda en España hace falta un mapa, una cantimplora y una brújula para saber dónde está cada cual, quién está enfrentado a quién y quién manda donde no manda nadie».

En referencia a la defensa de la mujer, el líder de la oposición también ha sido claro asegurando que Sánchez «no puede hacer a las mujeres y a las adolescentes españolas rehenes de sus socios», del mismo modo que no puede «seguir desprotegiendo a las mujeres para proteger su Gobierno».

«Si tiene usted algún tipo de respeto y rigor por las mujeres y las menores españolas, acabe de una vez y reforme de una vez la ley del ‘solo sí es sí’ para que no salga más barato delinquir contra la dignidad de las mujeres y de las niñas españolas», ha espetado Feijóo.

Finalmente, el líder del PP ha querido poner en valor a su partido frente a Pedro Sánchez y el PSOE.Para ello se ha valido de los numerosos vídeos propagandísticos realizados desde la factoría para ello de Moncloa. En en ellos, siempre casualmente, el presidente del Gobierno aparece junto a gente de todo tipo.

A todos ellos les une un aspecto: todos alegres por sus políticas…y todos ellos ellos militantes socialistas o con lazos familiares con altos cargos. Con Sánchez nada queda a la improvisación.

Quizás uno de los ejemplos más sangrantes fue el de una joven que recibió «por sorpresa» la visita del presidente para hablar de la subida del Salario Mínimo Interprofesional. Cabe destacar lo de «por sorpresa» porque ella misma publicó en sus redes sociales que ante la visita de Sánchez al día siguiente ella estaba muerta de nervios.

En contraposición a ese modelo de cartón-pidedra, Feijóo reivindica el del Partido Popular, que no es otro que el de una una formación que puede hacer sus actos «en la calle y en libertad» y «no solo con los afiliados, como hacen otros».