Imagen de un parquímetro de la zona ORA en ValenciaJOSÉ JORDÁN/ AYTO VLC

Comunidad Valenciana  PP y Vox alivian a los trabajadores de Valencia y aparcar en la zona ORA volverá a ser gratis a mediodía

El Ayuntamiento levantino saca adelante la propuesta para rectificar la política de Ribó: no se cobrará por estacionar de 14 a 16 horas y también se elimina el pago de 20 a 21, una hora extra que incluyó el de Compromís

Uno de los ejes sobre los que se asentó la gestión de Joan Ribó como alcalde de Valencia fue una política de movilidad caracterizada por estar completamente trufada de sectarismo y cuyas actuaciones se basaban en la mera ideología. Teniendo como premisa básica que el uso del vehículo privado es perjudicial para la ciudad, los ocho años que el dirigente de Compromís estuvo al frente del Ayuntamiento levantino se centraron en construir un nuevo modelo de ciudad cuyo resultado más palmario ha sido el clamor vecinal ante la proliferación de atascos y obras sin sentido.

Otro de los aspectos que más quejas recibió fue el aumento de las zonas de estacionamiento regulado, conocidas comúnmente como ORA. Enmarcadas como una herramienta más para recaudar, el anterior equipo de gobierno local además también aprobó dos nuevas franjas horarias en las que pagar por aparcar: entre las 14 y las 16 horas y de 20 a 21 horas. Este hecho provocó no poca polémica, de manera especial entre los trabajadores, quienes durante un año han tenido que acudir al parquímetro a depositar monedas cuando antes estaban exentos de hacerlo.

Sin embargo, para alivio de los bolsillos afectados, esos tramos volverán a ser gratuitos en las próximas semanas -cuando esté lista la ordenanza- gracias a una iniciativa aprobada por el Pleno del Consistorio y que ha salido adelante en virtud de los votos a favor del Partido Popular y Vox. La medida fue propuesta por la formación de Santiago Abascal y llevada a la sesión ordinaria, donde recibió el respaldo sin fisuras del PP, que gobierna en solitario, y que también se comprometió a ello durante la campaña electoral del 28 de mayo.

«Afán recaudatorio»

Respecto al grupo proponente de la moción, Vox subraya que volver a la gratuidad en la ORA durante el mediodía y en la última hora de la jornada cuenta con el respaldo ciudadano porque así se manifestó en las urnas en las últimas elecciones y creen que será positivo para su economía diaria: «Es una forma de defender los bolsillos de los valencianos», asegura la organización.

Argumentos similares aporta el PP. En palabras del concejal de Movilidad, Jesús Carbonell, las tarifas que se ha aprobado modificar tienen un «afán recaudatorio». «Entendemos que el espíritu de la ORA es la rotación y los horarios anteriores favorecían –en referencia a los que se volverá próximamente–, por ejemplo, que el vecino que vuelve a su casa a comer pueda encontrar aparcamiento gratuito en este horario», explica el regidor.

A quienes no les ha gustado en absoluto el cambio impulsado por Vox y el PP ha sido a los partidos de izquierdas con representación municipal. Así, el que fuera concejal de Movilidad con Ribó y artífice del urbanismo ideológico fomentado por su jefe de filas, el siempre polémico Giuseppe Grezzi, acusa al Ejecutivo liderado por la popular María José Catalá de querer hacer retroceder a Valencia a la ciudad «de los años 60 y en blanco y negro». Para sostener su posición señala que «la gente también va a hospitales o zonas administrativas, que es el servicio de la zona azul» de la ORA. Por su parte, la edil del PSPV-PSOE María Pérez también critica la propuesta, apuntando que este tipo de acciones sirven «para conocer el modelo de ciudad» al que aspira la alcaldesa.

Habitual atasco en la calle Colón de Valencia tras las obras de Joan Ribó.

La política de revisión de las franjas horarias en las zonas de paso no es sino un ejemplo más para restablecer en Valencia una política de circulación normal, como la había antes de 2015 con la entrada de la izquierda en el poder local y que, a pesar de tratarse de la tercera ciudad de España, no presentaba notables problemas ni agobios. De este modo, el Ayuntamiento ha anunciado que a lo largo del mes de octubre abrirá en la calle Colón, una de las arterias más céntricas de la capital del Turia, un segundo carril para el tránsito de vehículos privados en detrimento de un carril bus que Ribó construyó a pesar de que ya había uno.

Malas noticias para Compromís

Con ello Catalá cumplirá una promesa electoral que a la par era una de las demandas más solicitadas por los vecinos, hartos de estar parados durante minutos y minutos en lo que se ha convertido en un permanente embudo. Esta decisión favorecerá la circulación respecto a su estado actual, aunque Carbonell ha avanzado que se trata de una medida «transitoria» y provisional a la par que se sigue trabajando en un proyecto de reforma completo que se presentará una vez la Concejalía cuente con los informes pertinentes.

La obra en Colón no solo beneficiará a los coches que transiten por ella. También permitirá descongestionar otras vías alternativas por las que los conductores optaban como la Gran Vía Marqués del Turia, a la par que alejará el peligro de deterioro de algunos Bienes de Interés Cultural (BIC) cercanos. Es el caso de los monumentos de la calle Poeta Querol, que de un tiempo a esta parte ha visto incrementado su tráfico –es de un solo carril–, con la pertinente contaminación extra y peligro por que se pueda producir un accidente que se deriva para el patrimonio cultural.

Aunque Catalá lleva apenas cien días como alcaldesa, la izquierda valenciana y muy concretamente Compromís ve cómo su proyecto ideológico poco a poco se va dando la vuelta. El último ejemplo de ello, además de las franjas de la ORA y las actuaciones en la calle Colón, es el del eje Giorgeta-Pérez Galdós. Este tramo es uno de los más extensos de la ciudad y tenía previsto un proyecto para su remodelación que el Ayuntamiento del PP ha optado por no ejecutar al ser «insostenible en los términos previstos en lo que respecta a los niveles de servicio de las vías y colindantes».