El expresidente del Gobierno José María Aznar, en una conferencia en AlicanteMorell / Efe

 Aznar advierte de que aprobar una ley de amnistía «termina con el sistema constitucional»

El expresidente del Gobierno acusa al PSOE de haber «elegido como compañeros de viaje a Bildu, ERC y Puigdemont» y pide a la sociedad que no se «inhiba» ante la «situación límite» que vive España

El expresidente del Gobierno José María Aznar ha reiterado este martes su rechazo a que el Ejecutivo central esté avanzando en una ley de amnistía para beneficiar a los líderes independentistas catalanes a cambio de sus apoyos en la investidura de Pedro Sánchez. En su opinión, esta medida «termina con el sistema constitucional» y ha apelado al Tribunal Constitucional (TC) en su papel de «garantizar» el respeto a Carta Magna. «No puede decir que la Constitución dice lo que no dice», ha señalado el exmandatario.

Estas palabras las ha pronunciado Aznar durante su intervención en el ciclo de Conferencias Circulares del Cámara Business Club, un foro de encuentro empresarial impulsado por la Cámara de Alicante. En su intervención, ha apuntado que España se encuentra en una «situación límite», ya que se está discutiendo sobre «la concesión de la amnistía y la posibilidad de organizar consultas para la autodeterminación en algunas comunidades para estar en el Gobierno». Asimismo, se ha reafirmado en que la amnistía «no tiene cabida en la Constitución», por lo que la ha definido como un «pago del jefe de Gobierno a los separatistas catalanes y antiguos terroristas del País Vasco».

«No solamente borra pena, borra el delito y es como si no hubiera habido golpe de Estado. Al borrar la pena y el delito, legitima a los que lo dieron. Eso termina con el sistema constitucional de España si es aprobado», ha hecho hincapié.

El PSOE ha «elegido » a sus «compañeros»

De hecho, ha explicado que la que se aprobó en 1976 no sería el mismo caso que el actual, puesto que aquella era «fundacional de la democracia» y porque posteriormente esa figura «se excluyó de la Constitución, como los indultos generales». En cuanto al papel que el TC puede desempeñar a la hora de validar o no la legalidad de la medida, Aznar ha subrayado que no es un órgano «creado para ser poder constituyente ni legislativo», sino que «está para garantizar que la Constitución se respeta, pero no puede decir que la Constitución dice lo que no dice».

Respecto a la posibilidad de que el pacto entre Sánchez y los secesionistas catalanes contemple la celebración de un referéndum por la independencia, el expresidente del Gobierno ha lamentado que los socialistas estén «de acuerdo» cuando la formación ha sido uno de los «pilares constitucionales». «El PSOE no es prisionero de Bildu, de ERC o de Puigdemont. El PSOE ha elegido como compañeros de viaje a Bildu, ERC y Puigdemont. Ese es el cambio esencial, que pone en cuestión la estabilidad de la Constitución Española y pone en cuestión la convivencia democrática entre españoles», ha aseverado.

Pedro Sánchez saluda a la portavoz de EH Bildu en el Congreso de los Diputados, Mertxe AizpuruaEduardo Parra / Europa Press

Frente a ello, ha hecho un llamamiento a la ciudadanía, a quien ha pedido que no se «inhiba» y que reflexione acerca de la situación por la que atraviesa España: «Las crisis políticas son las que peor se resuelven. Es más fácil deshacer que hacer la Transición, pero cuando se deshace a ver cómo se juntan las instituciones rotas. Por eso, no es momento de inhibirse, es momento de hablar, que cada uno aporte lo que pueda», ha insistido. En esta línea, ha advertido de que el país se encuentra en un «problema político existencial», si bien también ha matizado que eso no significa que esté «socialmente roto» porque la conflictividad social es «escasa».

Por otro lado, Aznar ha abogado por realizar «reformas estructurales para que el país progrese», puesto que a su juicio «España está desde 2015, por no decir desde 2008, prácticamente parada» y así «es muy difícil hacer nada». En base a ello, ha planteado la necesidad de abordar cuestiones «esenciales» para que el país sea económicamente sostenible, aunque a la par ha apuntado que a día de hoy esa tarea es complicada debido a las «circunstancias políticas».

Finalmente, consultado por sus años en la Presidencia del Gobierno, ha destacado que su compromiso con España se mantiene porque «trabajar por tu país ni tiene principio ni tiene fin». «En esos ocho años hubo el mayor progreso económico de España en toda su historia», ha dicho.