Los bous al carrer riegan cada año la Comunidad Valenciana con más de 300 millones de euros

Cada año, 8.700 festejos taurinos se celebran en la Comunidad Valenciana. Los 259 municipios albergan celebraciones que cada vez tienen más adeptos y este año la Federación de Peñas Taurinas ha triplicado sus socios con respecto al año anterior. No es casualidad que los bous al carrer dejen más de 300 millones de euros cada año en la región.

Es en Castellón donde hay más tradición. Esta fiesta genera en la provincia unos 150 millones de euros cada año, aunque solo suele salir en las noticias cuando hay algún fallecido. En 2022 se produjeron nueve muertes, algo que obligó este año a votar una moción de apoyo a las celebraciones en la Diputación de Valencia.

A propuesta de Vox, el pleno de la Diputación aprobó a finales de octubre, con el apoyo del PP y la abstención de Ens Uneix, la moción para «respaldar» los festejos en «todas las modalidades», ya que había que «poner en valor» la tradición de la Comunidad Valenciana. El motivo principal es el «arraigo popular» que tienen las celebraciones, además del impacto económico que tiene sobre la región.

Los números respaldan el apoyo político a las celebraciones. Más de 3.000 personas acuden de media cada día a estos festejos y cada uno de los asistentes participa durante más de nueve días a lo largo del año en alguna celebración, según un estudio realizado por la Universidad de Valencia.

De esas cifras se desprende que cerca de 820.000 personas acuden cada año a una celebración de los bous al carrer en alguna de las localidades de la Comunidad Valenciana. Eso tiene un impacto en la economía valenciana de más de 300 millones de euros al año, mientras que el coste de realizarlos es de 37 millones, según datos de la federación que organiza los festejos. Es decir, cada euro invertido se multiplica por 8,1.