Campana de volteo más grande del mundo, en Villarrealtantalan.com

Castellón  La campana de volteo más grande del mundo está en Villarreal

Custodiada en el santuario de San Pascual Bailón, es testigo de siglos de tradición y fe en la comarca de la Plana Baja

El municipio de Villarreal, situado en la comarca de la Plana Baja, en Castellón, alberga uno de los secretos más impresionantes de la historia y la cultura local: la campana de volteo más grande del mundo. En el Monasterio de San Pascual Bailón, se encuentra esta joya internacionalmente reconocida, que ha despertado la curiosidad de propios y extraños.

El santuario de San Pascual Bailón, cariñosamente conocido como «El Sant», es un complejo que engloba varios elementos de gran valor histórico y religioso. Entre ellos se encuentra el Templo Votivo Eucarístico Internacional, proclamado basílica menor por el Papa San Juan Pablo II, la Real Capilla con el sepulcro de san Pascual Bailón, el museo del Pouet del Sant y el convento de clausura de las madres clarisas, donde una costumbre arraigada entre su gente es dirigirse allí en busca de los cordonets, confeccionados por las madres, con la creencia de que traerán buena fortuna a quien los lleve consigo.

El origen del convento se remonta al siglo XVI, pero su importancia se consolidó gracias a la presencia, muerte y entierro de San Pascual Bailón. La Real Capilla, erigida en el siglo XVII para albergar los restos del santo, destacaba como uno de los primeros monumentos del barroco valenciano en orden de tiempo y mérito. Sin embargo, tanto la antigua iglesia conventual como la capilla barroca fueron devastadas por un incendio durante la Guerra Civil Española en 1936.

A pesar de los estragos causados por el fuego, la restauración del monasterio ha logrado preservar elementos característicos como el claustro, la escalera, la sala De Profundis, donde las religiosas antiguamente se reunían para rezar por los difuntos, y el refectorio. Pero, lo más impresionante es la presencia de dos torres campanario que albergan un carrillón de 72 campanas y un conjunto de 12 campanas de volteo, incluyendo la campana más grande del mundo.

Imagen de la campana de volteo más grande del mundo, en la Basílica de San PascualBasílica de San Pascual

La ciudad castellonense tiene la campana en uso más grande del mundo porque sí existe otra más grande, en Rusia, Tsar Kokol III, pero no está en uso, es solo una escultura, sin otro objetivo que el de que los turistas se hagan una foto a sus pies. La campana de volteo de Villarreal, bautizada como «Santísimo Sacramento», tiene un peso total de 3.360 kilogramos y un diámetro de 150 centímetros. Su función es parte de una tradición religiosa arraigada en la zona, pero su tamaño y alcance la han convertido en una atracción de fama mundial.

Herencia real y espiritual

Varios monarcas han visitado el santuario de San Pascual y sus campanas a lo largo de la historia. En 1992, el Rey Juan Carlos I y la Reina Sofía presidieron los actos durante las fiestas patronales, inaugurando la nueva Real Capilla. Anteriormente, miembros de las Casas de Austria y Borbón, como Felipe III, Felipe IV, Carlos III, Carlos IV, Fernando VII, Isabel II o Alfonso XIII, entre otros, han hecho visitas destacadas. Francisco Franco también visitó el sepulcro del santo en 1958. Además, líderes religiosos como el general de los frailes franciscanos y el nuncio del Papa han honrado el santuario con sus visitas en años posteriores.

Parte del conjunto de campanas de volteo que se encuentran en la BasílicaBasílica de San Pascual

Sin embargo, desde 2009 hasta 2018, esta imponente campana permaneció en silencio debido a problemas técnicos y de seguridad que impidieron su funcionamiento.

Fue gracias al empresario local José Gómez Mata, a través de su fundación familiar, quien asumió la responsabilidad de restaurar y poner en funcionamiento la campana de volteo, junto con el carillón de 72 campanas. Desde mayo de ese año las campana volvió a funcionar y retomó su deber.

La recuperación de este emblemático conjunto de campanas no solo resuena en la historia del municipio, sino que también marca un hito en la conservación del legado cultural español.

La Basílica de San Pascual Bailón donde se encuentra el «Santísimo Sacramento» es mucho más que un lugar de culto. Es un testamento de la fe, la historia y la tradición de la región, y cada vez que las campanas suenan recuerdan todo lo vivido por la ciudad de Villarreal, orgullosa de su historia y de su patrimonio.