Edificio del Banco Sabadell en Barcelona.EP

La opa hostil del BBVA al Banco Sabadell podría acabar con hasta 1.300 empleos en la Comunidad Valenciana

Los sindicatos advierten de que «no firmarán acuerdos forzosos» y apuestan por prejubilaciones a los trabajadores mayores de 55 años

los representantes de los trabajadores de Banco Sabadell y BBVA han comenzado a calcular cómo la posible fusión entre ambas entidades financieras podría afectar a las plantillas y, según las fuentes sindicales consultadas por el diario Información, hasta 1.300 trabajadores en la Comunidad Valenciana, podrían ser despedidos en un ERE.

Según Laura García, responsable del sector financiero de UGT en Alicante y empleada del Sabadell, la fusión de los dos bancos daría como resultado una plantilla combinada de 34.300 empleados en toda España, con 21.600 pertenecientes al BBVA y 12.700 al Sabadell. En la Comunidad Valenciana, esta relación se traduce en 1.400 trabajadores del BBVA y 2.200 del Sabadell, sumando un total de 3.600.

La duplicidad de oficinas entre los dos bancos en territorio valenciano ha generado gran preocupación en torno a la permanencia de los puestos de trabajo. En municipios más pequeños, es probable que se cierre una de las dos sucursales, lo que podría afectar a entre 600 y 800 trabajadores en el peor de los casos. Además, se suma la incertidumbre sobre el futuro de los 500 empleados de servicios centrales del Sabadell en Alicante, donde se encuentra su sede social.

«No se firmarán acuerdos forzosos»

La movilidad geográfica también se plantea como un desafío para los trabajadores, especialmente si los servicios centrales se trasladan a Madrid o Barcelona. García subraya que esta incertidumbre está afectando el desempeño laboral, ya que los empleados no saben qué les deparará el futuro.

En respuesta a estas preocupaciones, los representantes sindicales han dejado claro que «no firmarán acuerdos forzosos». Exigen que «cualquier proceso de reestructuración se realice a través de prejubilaciones y bajas voluntarias». Con miles de empleados mayores de 55 años en ambas entidades, existe un potencial considerable para este tipo de medidas, según dicen desde los sindicatos.

Se espera que Cataluña, la Comunidad Valenciana y Murcia sean los territorios más afectados por la posible fusión, dada la alta presencia de duplicidades en estas regiones, según apuntaba García al citado diario.