La exconsejera valenciana de Justicia deja Vox y critica su «deriva radical» en inmigración y violencia de género

La exconsejera valenciana de Justicia e Interior Elisa Núñez ha comunicado al líder de Vox, Santiago Abascal, su baja como afiliada del partido, en una carta en la que expresa su desacuerdo con la decisión de abandonar los gobiernos autonómicos y con «la deriva radical» de la formación «en las políticas contra la inmigración irregular y en materia de violencia contra la mujer».

«Acaté la decisión, de la que me enteré por los medios de comunicación, recluyéndome en el silencio por lealtad, pero sin compartirla. Silencio que rompo, cuando la distancia ha borrado sus efectos lógicos en mi ánimo. Ahora, y solo ahora, es cuando le comunico mi decisión», manifiesta en su misiva.

Núñez, que precisamente ha asistido este martes al traspaso de cartera a la nueva consejera Salomé Pradas (PP), defiende que en julio de 2023 aceptó el ofrecimiento del cargo desde su «prestigio social» e «independencia profesional y política», tras lo que señala que en agosto del mismo año se le «exigió la afiliación desde Vox España a la par que acataba las directrices que a través de sus representantes en la Comunidad Valenciana» le eran comunicadas.

«Muy orgullosa» de su gestión

«Y acepté, quiero dejarlo claro, porque era un Consell de coalición PPCV-Vox, las dos fuerzas políticas que en la Comunidad Valenciana sumaban la mayoría absoluta alcanzada por la derecha valenciana desde 1999 hasta 2011, que posteriormente se separaron. Un gobierno de unidad con un programa de 50 puntos suscritos en julio de 2023», subraya, y reivindica su cumplimiento de las directrices del partido «con el máximo respeto a sus organizaciones provinciales en la Comunidad Valenciana».

Dicho esto, Núñez explica que no comparte «la deriva radical que el Comité Ejecutivo Nacional de Vox ha introducido, tras el 9 de junio, en las políticas contra la inmigración irregular y en materia de violencia contra la mujer», como tampoco «el olvido de la infrafinanciación» de la Comunidad Valenciana, «perjudicada por el gobierno de Pedro Sánchez».

«Y, evidentemente, tampoco comparto el cambio de grupo en el Parlamento Europeo. No puedo en conciencia asumir las políticas y declaraciones de Viktor Orban, presidente del grupo al que se ha adscrito Vox en Europa; así como las de otros líderes que lo integran».

Contraria a la alianza con Orban

En cualquier caso, asegura sentirse «muy orgullosa de la gestión al frente de la Consejería de Justicia e Interior». «A mitad de 2024 había ejecutado más del 52 % del presupuesto presentado por mí en las Cortes Valencianas en diciembre de 2023. En mis intervenciones, parlamentarias y públicas, he defendido siempre las políticas suscritas por el PPCV y Vox», destaca.

Y lamenta «no haber tenido tiempo» para poder completar su visión de «una nueva Administración Valenciana de Justicia en el marco de las competencias estatutarias». «Asimismo, di solución, lo mejor que pude, a los problemas heredados de la anterior administración socialista con el personal que el partido me impuso desde el principio», agrega.

«Siendo consciente de no existir incumplimiento por parte del PPCV del acuerdo de gobierno suscrito con Vox para romperlo unilateralmente, cuando su gestión era aceptada socialmente como unidad de acción de la derecha valenciana, y el giro político con la nueva adscripción al grupo Patriotas de Europa en el Parlamento Europeo, que condiciona la nueva política de VOX, considero que lo mejor es regresar a mi situación anterior a la petición de afiliación exigida en agosto de 2023 y abandonar Vox», concluye.