Imagen de archivo de una torre de alta tensiónJ.Rodriguez/ Flickr

El interior de Castellón rechaza la línea de alta tensión proyectada que equivale a 1.390 campos de fútbol

El MAT y el Magda son los proyectos más sonados, que aunque han conseguido la autorización del Gobierno central, no han logrado la aprobación de las Cortes Valencianas por la oposición vecinal

La provincia de Castellón y, más concretamente, la zona del interior que limita con Teruel, lleva años convirtiéndose en un nicho importante para las energías renovables. Estos municipios contienen gran parte de las plantas fotovoltaicas y parques de molinos eólicos de la Comunidad Valenciana. Un mercado al que todavía le queda mucho por explotar y donde las compañías siguen presentando nuevos proyectos.

Aunque son múltiples las empresas que apuestan por esta zona de la Comunidad Valenciana para construir sus parques, no todos los proyectos de energías renovables que pretenden implantarse en Castellón acaban teniendo luz verde.

Y es que gran parte de la población castellonense del interior está en pie de guerra contra estos macroproyectos, que ocupan una zona importante de sus municipios. En algunos casos incluso zonas de uso residencial o explotaciones de agricultura y ganadería.

El MAT y el Magda son los proyectos más sonados, que aunque han conseguido la autorización del Gobierno central, no han logrado la aprobación de las Cortes Valencianas por el rechazo que suscita a los municipios de la zona.

El Magda es un proyecto de central fotovoltaica de 127,8 MW, que estaba previsto que estuviera dotado de alrededor de 148.000 placas solares en un terreno de 250 hectáreas, principalmente instaladas en el municipio castellonense de las Cuevas de Vinromá.

La compañía Tregmul Trade S.L., perteneciente a Akuo Energy España, ha presentado recientemente la solicitud de archivo del expediente administrativo al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, por lo que el proyecto queda suspendido por el momento y si finalmente la empresa decide volver a presentarlo, deberá hacerlo desde 0 y siguiendo las medidas propuestas en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA).

La MAT avanza pese a las alegaciones

Por otro lado, el proyecto que sí sigue en marcha y avanza a velocidad de crucero es la gran línea de Muy Alta Tensión (MAT). Se trata de un macroproyecto eólico que Forestalia quiere levantar en el lado turolense del Maestrazgo con 125 grandes molinos de viento en sus montes, que evacuará la energía hasta la costa atravesando la provincia de Castellón y ocupando el equivalente a 1.390 campos de fútbol.

El fondo danés Copenhagen Infraestructure Partners (CIP) solo necesita la autorización de construcción para el inicio de las obras, que prevé que pueda publicarse en el BOE en los próximos días.

Hasta 50 colectivos diferentes se han unido y están realizando una petición formal para que el proyecto del MAT no llegue a aprobarse. Entre ellos se encuentran administraciones, sindicatos, plataformas ciudadanas y asociaciones vecinales, que han firmado un manifiesto para pedir «a los responsables políticos del Ministerio que no autoricen estos proyectos por las graves consecuencias que supondrán para los vecinos y pueblos de las comarcas del interior de Castellón».

La plataforma 'No a la Mat', creada para frenar este proyecto, ha pedido la movilización de los vecinos afectados en la zona de de Portell, Cinctorres y Morella el sábado 3 de agosto, con la jornada 'Defensem la comarca, tombem la MAT', pensada para concienciar y visibilizar la oposición frontal de los pueblos de la comarca de Los Puertos.

Estas asociaciones han recordado en un comunicado que ambos proyectos cuentan con informes desfavorables por parte de la Diputación de Castellón y las consejerías de Patrimonio, Paisaje y Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana. Asimismo, destacan que son proyectos «judicializados» ante el TSJ de Madrid.

«Queremos un modelo de implantación de renovables ordenado, basado en el consumo y la producción local de energía que sea racional, democrática, sostenible y respetuosa con nuestros pueblos y nuestro patrimonio, biodiversidad, paisaje y modo de vida», defienden. Por ello, el manifiesto acaba haciendo un llamamiento a las administraciones estatal, autonómica y provincial para que «en ningún caso» se otorgue la utilidad pública que dé vía libre a los dos megaproyectos.

'MACROrenovablesNO'

Esta movilización no es un caso exclusivo de la provincia de Castellón, ya que se ha extendido por toda España y son muchos los residentes de zonas del interior que se niegan a estas macroconstrucciones. El MACROrenovablesNO es un movimiento ciudadano orgánico en defensa de los territorios afectados por las macrorenovables, que cuenta con la participación de personas y plataformas ciudadanas de todas las Comunidades Autónomas de España y presenta algunos de los principales argumentos que demuestran por qué los macroproyectos de renovables no son verdes, justos ni sostenibles.

«La transición energética hacia fuentes renovables, en manos de fondos de inversión, lobbies financieros especulativos y gobiernos corruptos, es un atentado contra la naturaleza y la vida rural. Una transición energética verdaderamente ecológica y justa sólo es posible cambiando los paradigmas productivos y económicos, pasando de la generación centralizada a la generación distribuida, del oligopolio a las soberanías energéticas locales», han anunciado en un comunicado desde la plataforma.

No todos los proyectos de energías renovables que se ponen sobre la mesa para Castellón y la Comunidad Valenciana están trayendo tanto rechazo. En el caso de estructuras que cumplen con las normas ambientales y no destruyen las explotaciones de los vecinos no están trayendo una repercusión tan negativa con los vecinos.

Este es el caso de la empresa saudí de Alfanar, que proyecta dos grandes proyectos en los que invertiría hasta 65 millones de euros. Que constan de molinos de viento de hasta 164 metros, más concretamente en la Sierra del Caballo, que separa los municipios de Alcalá de Chivert y Las Cuevas de Vinromá.