La costosa luz al final del túnel: la reconstrucción del edificio incendiado en Valencia supondrá 30 millones

Cuando faltan pocos días para que se cumplan seis meses de que la sociedad valenciana en particular y la española en general vieran en directo y con horror cómo ardía todo un edificio del barrio de Campanar en el que murieron diez personas, los afectados pueden ver un poco de luz al final túnel en lo que a la reconstrucción del inmueble se refiere. Eso sí, esa solución que les permitiría volver a sus casas, lejos de ser barata, va a ser más que costosa.

Y es que la Asociación de Propietarios del Incendio de Campanar (APROICAM) ha realizado un estudio según el cual la rehabilitación total del inmueble «podría rondar los 30 millones de euros», una cantidad nada baladí. Eso sí, esa previsión está a falta de concretar en aspectos como las necesidades generales y de las que se encargará, según el acuerdo alcanzado por los vecinos, el estudio de arquitectura Arqueha, que tardará aproximadamente siete meses en ejecutar todas las tareas correspondientes.

A finales de agosto o en septiembre

La decisión de rehabilitar el edificio es algo que desde el primer momento tuvieron los residentes como la opción principal, una postura que el colectivo ya dio a conocer a través de sus perfiles en redes sociales. A partir de ahora, los pasos a seguir tienen que ver con fijar el coste definitivo. Dentro de ese montante, la primera gran partida corresponde al desescombro, que, esta vez, sí está determinada en 1,5 millones de euros.

Estas labores tienen un calendario previsto de realización que se complementa con la limpieza del bajo comercial de la empresa Tedi, dedicada al hogar y a la decoración, con el que el inmueble arrasado por las llamas cuenta. A priori, dicha labor de desescombro, en palabras de un miembro de la asociación, culminará «a finales de agosto o en septiembre». A nivel general, las actuaciones consistirán en «picar, alisar paredes y quitar todos los elementos contaminantes y son unos gastos que cubre el seguro». En términos globales, llevará entre los cuatro y los cinco meses.

Igualmente, se irán retirando elementos tales como electrodomésticos u otros como parámetros verticales, pladur, aires acondicionados, además de los ascensores, que se deberán cambiar junto a otros aspectos de la fachada calcinada por el fuego y que todavía a día de hoy sigue manteniendo su lona de roca adherida. En lo referente al sótano del complejo, el incendio no le afectó, por lo que el grueso de lo que habrá que hacer será lo relativo a la limpieza. Del mismo modo, las zonas comunes y la piscina, que se vació, también serán objeto de análisis.