Dos recursos judiciales enturbian el regreso a la política de Camps
La Fiscalía Anticorrupción anuncia que pedirá al Tribunal Supremo que revoque la absolución del expresidente valenciano, una estrategia que también va a llevar a cabo el PSOE
A medida que el horizonte judicial del expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps se iba despejando, sus manifestaciones acerca de una eventual vuelta a la primera línea política eran más frecuentes y contundentes. Esas intenciones se confirmaron a finales del pasado mes de mayo, cuando la Audiencia Nacional absolvió al exmandatario y, de esa manera, dio carpetazo a su última causa en los juzgados.
Cuando se conoció la noticia, el propio Camps dio una rueda de prensa en la que valoró la decisión de los tribunales y, entre otros asuntos, reafirmó su deseo de retomar la actividad institucional tras más de una década con investigaciones y encausamientos.
Sin embargo, es probable que esa vuelta al rol político se tenga que demorar más de lo que al exjefe del Consell le hubiera gustado. Al menos tendría que ser hasta que el Tribunal Supremo estudie y resuelva los dos recursos que se van a interponer ante la absolución del valenciano y que le exoneraba de haber cometido ilícitos al conceder adjudicaciones a una empresa de la trama Gürtel.
Sigue los pasos del PSOE
El último de los mencionados recursos en ser anunciado ha sido el de la Fiscalía Anticorrupción, con lo que el Ministerio Público a cuyo frente está el más que polémico Álvaro García Ortiz (que podría resultar investigado en cuestión de días o semanas) sigue así los pasos del PSOE, que la pasada semana avanzó que pedirá revocar la sentencia absolutoria de Camps. Éste era clarificador al apuntar que la gestión del exdirigente autonómico se «aleja cualquier prueba o indicio con trascendencia penal».
Además, los magistrados también dieron como probado que «no existe prueba o indicio alguno de orden, sugerencia o intromisión» por parte de Camps para que se adjudicase un contrato a la sociedad Orange Market, propiedad de Álvaro Pérez, conocido como 'El Bigotes' y uno de los cabecillas de la red de corrupción que lideraba el también condenado Francisco Correa.
Frente a la postura común que van a emprender los socialistas y la Fiscalía, el expresidente engloba los recursos en el contexto de una «persecución política en toda regla» que achaca a un plan para acabar con su carrera política cuando empezó la primera acusación y que ahora pretende frenar cualquier tipo de aspiración para que su retorno a la esfera pública pueda ser una realidad.
No obstante, no parece que la estrategia de los socialistas y de Anticorrupción vaya a mermar la hoja de ruta que Camps tiene decidida, más allá de dilatarla en el tiempo porque, tal como asegura, no le «asustan» ni le dan «miedo» las acciones que se van a llevar a cabo porque provienen de aquellos que, a juicio del exmandatario, «no tienen catadura moral» y, de hecho, prevé que todo ello «caerá por su propio peso».
Por tanto, el plan del que fuera una de las caras más conocidas y con mayor peso político en el Partido Popular y entre los barones territoriales sigue intacto y, tal como señaló en su entrevista con El Debate tras ser absuelto por última vez, habló con el presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien le dijo que en el futuro hablarían «con tranquilidad para ver cuál es la mejor ubicación para comenzar, para recomenzar de nuevo» su «vida en la política del partido».
«Aceptaron de buena gana que, si salía absuelto de esta última causa, yo me incorporaba a la vida política en primera línea del partido», remarcó en referencia al líder de la oposición y al portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Miguel Tellado.