
Se han reducido los casos de acoso, pero han aumentado las agresiones en grupo
Sentencia Ejemplar
La Justicia valenciana condena al British College a indemnizar con 6.540 € a una alumna víctima de ‘bullying’
La joven de 17 años sufrió maltratos y vejaciones graves, durante más de un año, por parte de dos compañeros de clase que llegaron a amenazarla de muerte
Intentaron asfixiarla con «la mano» y «con una almohada que colocaron sobre su cabeza», amenazaron con matarla, la acosaron sin tregua durante un año entero, entre septiembre de 2021 y noviembre de 2022, en el que se produjeron episodios de maltrato explícitos y vejaciones varias por los que el centro educativo al que acudían víctima y acosadores tendrá que indemnizar a esta última a la que su familia decidió cambiar de colegio
El Juzgado de Primera Instancia número 3 de Paterna, en Valencia, ha condenado al British College de La Cañada a abonar un total de 6.540 euros más intereses a una joven alumna de 17 años que sufrió bullying, durante más de un año, a manos de dos compañeras con las que compartía clase. La resolución a la que ha tenido acceso El Debate recoge los «incidentes» que la adolescente padeció en horario lectivo, en las instalaciones escolares y que conformaron, de acuerdo con el fallo, un «acoso» en toda regla.
En concreto, durante los cursos equivalentes a segundo y tercero de la ESO, la adolescente vio cómo sus compañeras la aislaban o propiciaban que «se quedara sola si ella no hacía lo que las acosadoras querían»; le quitaban «objetos personales y el almuerzo» que llevaba de su casa «hasta que la menor optó por dejar de llevar aquellas comidas que, por gustarles más a sus agresoras» sabía que eran objeto de interés para ellas; le escondían pertenencias «por el mero hecho de hacerla sufrir»,... Y pese a los esfuerzos de la joven que les pedía desesperadamente que se los devolviesen, «ellas no le hacían caso, llegando a percibir la niña que disfrutaban tanto más cuanto más se entristecía y molestaba ella por no conseguir» recuperarlos. Hasta tal punto que las acosadoras llegaron a confesarle «que todavía tienen cosas suyas en casa».
No satisfechas con las humillaciones relatadas, las dos chicas se reían de ella «cuando participaba en clase e, incluso, cuando sacaba mejores notas» que ambas. En una ocasión la víctima «sacó un 8 en Historia y ellas dijeron al resto de la clase que había copiado, cuando era falso».
«Le tiraban las libretas suyas, conminándola a que hiciese las tareas por ellas», la maltrataban físicamente con «empujones intencionados para hacerla chocar con otras compañeras» o «contra las paredes»; y, en una ocasión, contra una palmera del patio. «Le propinaban bofetadas. En una ocasión una de las agresoras le llegó a arrancar un mechón de pelo».
Se trataba de «excluirla» y «fomentar su exclusión del resto de la clase», hasta el punto de que «trataron de impedir su relación de amistad con otra compañera» concreta que se acercó a la víctima, volviendo a agredirla por ello y «dejando de hablarle».
A pesar del calvario al que se enfrentaba cada mañana y de la situación en la que se encontraba, «durante las vacaciones denominadas Sky Tripp Semana Blanca», organizadas por el colegio en el mes de marzo de 2022, «se vio obligada a convivir veinticuatro horas con sus agresoras, que llegaron a implantar un simulacro de disciplina militar, gritándole, haciéndole novatadas, obligándola a dirigirse a ellas como comandante» y, lo que fue todavía más grave, «incluso, inmovilizándola, amenazándola con matarla e intentando asfixiarla con la mano y con una almohada que colocaron sobre su cabeza llegando a sentarse encima».
En el mes de junio de ese mismo año, durante la «excursión de final de curso, se burlaron de ella y le hicieron fotos que subieron a redes sociales mofándose». En concreto, «una instantánea sentada en el autobús sola, con su mochila al lado» donde podía verse que «habían dibujado un órgano sexual masculino junto a la boca de la niña y escrito 'Compañero leal de Bus. Mochila Bristish College'».
Ahora, la demanda presentada por la madre de la víctima ha sido avalada, de forma parcial, por la Justicia en primera instancia. No en vano pese a que la familia de la joven solicitaba una cantidad superior a 20.000 euros, argumentando que como resultado del bullying sufrido desarrolló un grave cuadro de depresión, ansiedad y estrés, que la llevó a precisar de tratamiento psicológico, el Juzgado de Paterna ha considerado, por el contrario, que una compensación de 6.540 euros, que tendrá que pagar el colegio como responsable último de los hechos ocurridos, está más ajustada a los daños sufridos.