Armada española  S-81 Isaac Peral: intenso entrenamiento en simuladores ante las primeras pruebas de mar

La dotación del S-81 Isaac Peral lleva a cabo un «exigente proceso de instrucción y adiestramiento» en simuladores, antes de realizar las primeras pruebas de mar del submarino en «próximas semanas», según ha informado la Armada. El submarino convencional más avanzado del mundo, como lo define Navantia, ha entrado en la recta final de su complejo proceso de construcción, superando uno tras uno los diferentes hitos de seguridad.

Como informó El Debate, estos modernos simuladores reproducen la parte de crujía y estribor de la Cámara de Mando del submarino, «incluyendo el periscopio de ataque, la pantalla táctica y las siete consolas multifunción», según explica la empresa. Además, el simulador incluye una zona que hace las veces de la cámara de torpedos «que contendrá la dirección local de lanzamiento de armas y control de los tubos».

El S-81 es un submarino con unas fortalezas que lo convierten en la «joya de la corona» de la Armada. Tiene capacidad para misiones transoceánicas, alto nivel de automatización y cuenta con una tripulación reducida. A nivel de potencia ofensiva, dispone de capacidad táctica para la guerra antisubmarina, guerra antisuperficie o ataque a tierra.

El submarino dispone además de una alta capacidad de detección e identificación así como el denominado bajo coeficiente de indiscreción. Pero quizás una de las grandes y principales aportaciones tecnológicas sea el sistema AIP de última generación. El AIP, también llamado BEST (Bioethanol Stealth Technology), es una de las características claves de esta gama de submarinos. El sistema AIP permite «reformar el bioetanol, evitando así la necesidad de tener hidrógeno a bordo», según explica Navantia. Esto significa una autonomía independiente de la atmósfera de hasta tres semanas. En definitiva, una máquina silenciosa, potente, con gran capacidad ofensiva y una gran autonomía de inmersión.

Según la información facilitada por la Armada española, el Sistema de Combate del Submarino S-80 incluye los siguientes elementos:

• Capacidad de lanzamiento de misiles de intervención en tierra a larga distancia.
• Sistemas de comunicaciones por satélite y enlace de datos Link, para integración en la Fuerza.
• Sensores acústicos de corto, medio y largo alcance que permitan la detección, clasificación, aproximación y ataque a unidades de superficie, submarinos y tráfico mercante, detección de minas y otros obstáculos.
• Medios de detección visuales, optrónicos (todo tiempo) y electromagnéticos que le permitan llevar a cabo, de forma discreta, la aproximación, el ataque, la evasión y las operaciones de obtención de inteligencia.
• Medios de ayuda a la navegación que permitan operar con la precisión que exigen determinados cometidos.
• Torpedos pesados de doble propósito y largo alcance, misiles antibuque y minas.

Según las directrices del Ministerio de Defensa, los Submarinos S-80 deberán hacer frente, tanto en el océano Atlántico como en el mar Mediterráneo, a las amenazas de:

• Campos minados.
• Buques de superficie, con sonares activos y pasivos.
• Aeronaves antisubmarinas, con radar, sonoboyas activas y pasivas y sonar calable.
• Submarinos nucleares y convencionales de diseño avanzado.