Defensa | Ejército de Tierra  Credo legionario en Irak y Líbano

«No se quejará: de fatiga, ni de dolor, ni de hambre, ni de sed ni de sueño; hará todos los trabajos: cavará, arrastrará cañones, carros, estará destacado, hará convoyes, trabajará en lo que le manden». Este es uno de los principios del credo legionario, que encierra el espíritu de la Legión desde su fundación. Un espíritu que la Brigada «Rey Alfonso XIII» II (Brileg) se dispone a desplegar en dos nuevas misiones: Líbano e Irak. «A la voz de 'A mí la Legión', sea donde sea, acudirán todos, y con razón o sin ella defenderán al legionario que pide auxilio».

Ambos despliegues, la operación 'Libre Hidalgo' de Líbano de la ONU, y la misión en Irak de la OTAN, se completarán en noviembre y cuentan con un total de 604 legionarios. Las tropas españolas llevan más de 16 años en Líbano, vigilando la frontera con Israel (Blue Line) y apoyando a las fuerzas libanesas.

«Jamás un Legionario dirá que está cansado, hasta caer reventado, será el Cuerpo más veloz y resistente». De hecho, se necesitan seis meses para la preparación de un contingente de tropas como el que España envía ahora. Seis meses de un intenso entrenamiento para poder afrontar misiones en dos inestables zonas, de indudable riesgo. Durante los últimos meses, el contingente ha efectuado numerosos ejercicios para engrasar la coordinación, así como el empleo de Mando y Control, técnicas de escolta y la preparación de todo el material disponible.

«Cumplirá su deber, obedecerá hasta morir». Desde 1992, que abrió misión en Bosnia-Herzegovina, la Brileg ha iniciado también las misiones en Albania, Kosovo, Macedonia, Irak, El Congo y Líbano, y ha participado también en Afganistán y Malí.