Madrid inaugura su monumento a la Legión sin representación del Ministerio de Defensa
Cientos de personas se han reunido en la inauguración del monumento que ha estado presidido por el alcalde de Madrid y el general de la Brileg
La Legión española ya tiene su monumento en Madrid, en la capital de España. Ciento dos años ha tardado en estar representado uno de los cuerpos militares más queridos y apreciados del Ejército español.
Este martes, el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez Almeida y el general jefe de la BRILEG y general de división, Enrique Millán Martínez, junto con cuatro coroneles de los cuatro tercios de la Legión, han inaugurado una estatua con un objetivo muy claro: «La seguridad y la libertad de la que disfrutamos aquí en Madrid en el centro de España no sería posible si a cientos de kilómetros nuestra soberanía y nuestras fronteras no estuvieran defendidas día a día con vuestra abnegación y vuestro sacrificio», ha ensalzado el alcalde de Madrid.
El acto, al que han acudido cientos de personas y que se ha celebrado en el Paseo de la Castellana, justo enfrente del Cuartel General del Estado Mayor de la Defensa, ha estado precedido de la polémica. Y es que el Ministerio de Defensa, después de que el Gobierno incrementase la dotación presupuestaria destinada al Ejército y en plenas negociaciones con Podemos, siempre reacios a destacar los valores militares, no ha enviado ningún representante civil.
El Ministerio de Defensa ha quedado más en evidencia cuando en la inauguración ha hecho acto de presencia la que fue titular del Ministerio en el Gobierno de Mariano Rajoy, María Dolores de Cospedal, quien ha estado presente a título personal, pero no por ello ha dejado de saludar a numerosos militares con los que trabajó y también a los representantes políticos del Partido Popular.
La oposición se queda fuera
Prueba de esta polémica es que al acto no han los portavoces municipales de la oposición. Junto al regidor han estado presentes la delegada de Cultura, Andrea Levy; la concejala de Chamartín, Sonia Cea; la delegada de Coordinación Territorial, Silvia Saavedra, así como el portavoz del Grupo Municipal de Vox, Javier Ortega Smith.
En sus palabras a los allí reunidos, el alcalde Martínez-Almeida ha puesto de relieve que la Legión es «un crisol de personas de muy diverso origen, unidos por un Código de Honor» y ha indicado que el «credo legionario los igualaba a todos». «Un crisol parecido es Madrid, porque aquí no se pregunta a nadie de dónde viene, sino si está dispuesto. Esta estatua será testigo del compromiso de Madrid con España», ha afirmado.
La obra ha sido esculpida por Salvador Amaya a partir de un boceto del pintor de batallas Augusto Ferrer-Dalmau. El monumento se compone de una escultura en bronce que representa a un legionario veterano de la época fundacional de la Legión, ataviado con uniforme de la época y con una altura de 2,78 metros. La estatua está colocada sobre un pedestal de piezas de granito de tronco piramidal de base cuadrada con unas dimensiones de 1,48 por 1,48 metros en la parte superior y 2,26 por 2,26 metros en la parte inferior y una altura total de 3,52 metros.