La emoción de Robles al recibir la noticia del rescate de los dos niños de Turquía por parte de la UME

La tensión y emoción vividas esta mañana en localidad turca de Nurdagi durante el rescate de dos niños de corta edad, Leyla y Elif, y el posterior de su madre, Muslin, ha llegado hasta Jaén, donde la ministra de Defensa, Margarita Robles, se encontraba inaugurando la Oficina del Centro Tecnológico de Desarrollo y Experimentación, una iniciativa que estará especializada en los campos tecnológicos del vehículo autónomo y conectado, la inteligencia artificial y la lucha antidrón.

Allí, en un encuentro informal con los periodistas, la ministra Robles no ha podido contener la emoción al recibir las noticias del rescate de los pequeños. «Ver a lo niños salir tan… tan… tan vivos, la verdad es que nos ha emocionado», ha afirmado Margarita Robles.

Estas palabras las pronunciaba cuando los equipos de la UME todavía no habían rescatado a la madre de los dos pequeños. Se sabía que se encontraba viva. La propia Unidad Militar de Emergencias explicaba en una nota de prensa que «tras los complejos trabajos de corte y perforación el equipo español pudo hablar con la madre, recabar información, darle instrucciones para el rescate y mantenerle la esperanza» hasta que a lo largo de la mañana han podido salir los tres sanos y salvos. No hay más que ver la imagen enviada por los mismos miembros de la UME para contagiarse de la emoción del momento.

Una vez que todo había acabado, la ministra daba más explicaciones, ya de una forma más sosegada y menos informal, narraba a los medios de comunicación cómo había sido el rescate.

Desde el martes, un contingente de 55 efectivos de la UME se encuentra en Turquía para para colaborar en las tareas de búsqueda y rescate. Esta aportación cuenta con un equipo USAR del Segundo Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM II), con base en Morón de la Frontera (Sevilla), y otro de UMEDAT para evaluación de desastres.

Esta activación se produce dentro del Mecanismo Europeo de Protección Civil, un fondo voluntario que permite dar respuesta a catástrofes dentro y fuera del ámbito de la Unión Europea.

Desde que las autoridades turcas asignaron los cometidos, la UME trabaja por encontrar personas vivas y fallecidas en la provincia de Gaziantep.