Ejército de Tierra El significado oculto de los cordones de cadete de la Princesa Leonor
Tras cumplir su mayoría de edad y el solemne acto de jura de la Constitución, que tuvo lugar el pasado día 31 de octubre en el Congreso de los Diputados, la Princesa Leonor mantiene su formación en la Academia General Militar de Zaragoza. Una formación rigurosa, en la que se está volcando la Princesa de Asturias.
La Academia General Militar de Zaragoza mantiene un alto grado de exigencia, de acuerdo a los retos militares actuales, pero también a su larga historia. Una historia repleta de tradiciones, alguna de ellas muy curiosa. Un ejemplo son los cordones del cadete.
Todavía hoy en día existe una antigua historia sobre el origen de dichos cordones, historia que se remonta a las guerras de Flandes. Por aquel entonces, llegó a oídos del Duque de Alba que un contingente de tropas auxiliares flamencas había demostrado escaso valor en la acción frente al enemigo. El Duque entró en cólera y se planteó ahorcar a los soldados de dicho grupo.
Al enterarse, los soldados, se colgaron del cuello una cuerda con un clavo para facilitar el ahorcamiento llegado el momento. A partir de ese momento, las actuaciones de la unidad fueron valientes y marcadas por el sentido del honor. Desde aquel momento, los cordones pasaron a ser considerados un «atributo de distinción y notoriedad para la unidad que lo portaba», tal y como recoge la historia de la Academia Militar General.
La Ordenanza de 1762 instaura en la Enseñanza Militar el uso de los cordones. Pero en 1875 un Real Decreto suprime la denominación de cadete y el uso de los cordones.
La reapertura de la Academia General Militar en 1927 recuperó en su Reglamento la denominación de cadete (en lugar de alumno) y el empleo de los actuales cordones con el diseño y color rojo actual.
La instauración de la II República en 1931 con su reforma de la institución castrense supuso entre otras medidas el cierre de la General, si bien, se mantuvo el uso de los cordones rojos en las Academias de cada Arma y Cuerpo.
Tras la Guerra Civil en 1942 abre de nuevo sus puertas la Academia y sus cadetes recibieron, «como otras tradiciones celosamente guardadas», este distintivo externo tan característico.
Con el transcurso del tiempo el uso de los cordones utilizando el mismo diseño se extendió a todos los alumnos en periodo de formación. Cambiaba el color del cordón, de modo que para los ingresados en la Academia General Básica de Suboficiales era blanco; para la Academia Especial Militar, rojo y blanco; y para los que realizaban el servicio militar en la Milicias Universitarias, verdes.